IDENTIDAD CULTURAL
Como buena colombiana que soy, reconozco que en Medellín tenemos la costumbre de alardear de nosotros mismos con frases como: “el paisa es una verraquera” o “Medellín es una chimba”.
Hay que reconocer que como colombianos somos dizque muy orgullosos de nuestro país, que porque tenemos una gran cultura, hermosos paisaje y gente carismática; pero como no todo es color de rosa y no se puede tapar el sol con un solo dedo, tristemente las secuelas de la época de la violencia y el narcotráfico todavía son visibles, sobre todo en los pueblitos más escondidos y en la periferia de las ciudades, sin embargo esta mancha en la historia de nuestro país ha tratado de limpiarse y al parecer con los métodos equivocados.
A pesar de creernos una “chimba” por ser colombianos, por ser paisas, costeños o cachacos, etc., ya ni siquiera somos nosotros mismos. Ya no conocemos el plato típico de nuestra región (a menos que sea la bandeja paisa, que al parecer es el único que no olvidamos), el traje típico, el ave nacional, el árbol o la flor.
El gobierno de nuestro país ha implementado propuestas de solución para el crimen y la violencia, pero se han equivocado, pues han “copiado” y “pegado” directamente las propuestas de solución que han ideado e implementado otros países, pero como las condiciones y la realidad cultural de Colombia no es igual que en otras partes, estas propuestas han fracasado.
Una parte importante de nosotros se está borrando, cada vez tenemos menos identidad cultural, menos reconocimiento de nuestro entorno. Y no digo que debamos mantenernos estáticos, pero es que de tanto copiar cada vez nos parecemos más a una extraña mezcla de modas norteamericanas, corea- nas, japonesas, mexicanas, turcas y cuanta influencia externa llegue al país.
No pienso que sea malo adaptar costumbres extranjeras, porque al fin y al cabo si nos gusta no tenemos por qué privarnos, solo porque es de otra región, pero sí creo que es malo reemplazar y olvidar las propias costumbres, porque entonces en algunos años ya no tendremos el orgullo de tener un distintivo como el ser colombianos, paisas, costeños o cachacos, etc. Porque todo el mundo será igual
A pesar de creernos una “chimba” por ser colombianos, por ser paisas, costeños o cachacos, etc., ya ni siquiera somos nosotros mismos.
* Taller de Opinión es un proyecto de El Colombiano, EAFIT, U. de A. y UPB que busca abrir un espacio para la opinión joven. Las ideas expresadas por los columnistas del Taller de Opinión son libres y de ellas son responsables sus autores. No comprometen el pensamiento editorial de El Colombiano, ni las universidades e instituciones vinculadas con el proyecto.