LAS INSCRIPCIONES CONTINÚAN ABIERTAS
En días pasados, cuando su familia decidió cambiar de residencia, el antioqueño Camilo López Restrepo les encomendó a sus padres que le cuidarán los dorsales con los que ha competido en el Clásico EL COLOMBIANO. Jamás, en sus 13 presentaciones, ha triunfado, pero aquellos numerales los considera como trofeos.
Desde Bogotá, donde acaba de terminar su cuarto semestre de Economía en la Universidad de Los Andes, se inscribió vía Internet para la edición 45 del certamen ciclístico que comienza este sábado, y ayer, mientras estampaba su firma de participación, su alegría era evidente.
“Es que estar de regreso en casa, disfrutar las vacaciones al lado de mis seres queridos, y no perderme el Clásico, como sucedió en 2016 por mis responsabilidades de estudio, es muy bonito. Ganar es complicado, pero cruzar la meta será mi mayor satisfacción”, comentó ayer Camilo, uno de los primeros en recibir su kit de carrera en la sede principal de EL COLOMBIANO, en Envigado.
A sus 20 años, el piloto, quien competirá en la modalidad de cross country este domingo en el Parque del Agua y la Madera en el municipio de El Retiro, aún recuerda cómo fue su debut en el Clásico.
“Tenía solo cuatro años y Para la etapa extrema del Clásico siguen este viernes desde las 8:00 a.m. en la sede de EC.
el número que me dieron fue el 50. No olvido que el spiker de la carrera -lo sigue siendo Jhon Jairo Vergara- me alentaba durante el recorrido en Comfama de Rionegro; y que El evento inicia mañana con push bike y bicicrós en la pista Fernando Loquillo Giraldo de Envigado (8:00 a.m.)
mi padre - José López- corriera detrás de mí, como un ángel guardián, dándome también aliento y poniéndome cuidado ante un eventual accidente. Fue emocionante, así como subir a la tarima a recibir regalos. Les parecía increíble que a esa edad me le midiera a ese duro recorrido”.
Ni las caídas han hecho que su amor por este deporte desaparezca. “Al contrario, antes lo fortalecen a uno. El ciclismo es disciplina, por él se sacrifican muchas cosas, es como un estilo de vida, es pasión”, comenta Camilo, quien esta vez estará identificado con el número 17.
“El Clásico, en el que se le da oportunidad a chicos y grandes, es como un reto personal. Hacer parte de él es ya un triunfo”, pensamiento de López que comparten decenas de corredores que harán parte de la fiesta del pedal, que comienza este fin de semana con su etapa extrema