¡TODO ESTÁ GRAVADO!
Era abril de 1781 cuando un emisario del Socorro anunció en la plaza mayor de Santafé de Bogotá que 20 mil comuneros habían emprendido la marcha hacia la capital del Virreinato de Nueva Granada, llenando de incertidumbre a los chapetones asentados en las lujosas casas que rodeaban la plaza. La consigna de “Viva el rey y muera el mal gobierno” ya era proclamada tímidamente en diversas provincias, pero fue en la villa del Socorro en donde la revuelta explotó.
¿Por qué los americanos tenemos que pagar las cuentas de las guerras españolas? Decían muchos, y a lo que se referían era a las Reformas Borbónicas, encaminadas a recaudar fondos para la guerra contra Inglaterra, por lo que la Monarquía aumentó los impuestos a las alcabalas, al tabaco y al aguardiente, pero también resucitó un antiguo impuesto llamado “la Armada de Barlovento”, lo que asfixiaba aún más los bolsillos de los americanos.
“Todo está gravado: el capital y la renta, la industria y el suelo, la vida y la muerte”, con quejas como la anterior, los comuneros protestaban contra la Administración Real, no obstante, nunca buscaron independencia propiamente dicha, solo deseaban alzar su voz de disgusto por los abusos del Régimen Colonial, aunque su levantamiento sí fue un precedente de rebelión.
Dirán que hacer la comparación entre la situación tributaria de la Colombia del Siglo de las Luces con la Colombia contemporánea es incurrir en un anacronismo; claramente el contexto era diferente, la forma de Estado también, y variaban múltiples características. Sin embargo, sería desconsiderado el ignorar que la Colombia actual presupone para sus ciudadanos y empresas unas pesadas cargas tributarias. En este sentido, es prudente traer a colación el reciente ingreso del país a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), pues esto implica que Colombia cumpla con ciertos estándares interna- cionales, que, en teoría, harían al país más competitivo. La verdad es que no sirve que Colombia esté mejor posicionada en las listas de las calificadoras de riesgos si esto implica que se incrementen los impuestos, pues es a la ciudadanía a la que se debe favorecer, y si llegasen a incrementar los tributos, es de esperarse que se levanten nuevas Manuelas Beltrán y José Antonios Galán, tal y como otrora lo hicieron los citados en la Revolución Comunera
Para qué mejor calificación si esto implica aumento de los impuestos.
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