TOMÉMONOS EL “P’IRNOS”
O sea, tomémonos el último. Al fin y al cabo ya se acabó esta larga Feria de las Flores y aquí sí vale aquello de que: “cada uno habla de la feria como le va en ella”. No es mi intención hacer una evaluación personal, crítica o de alabanza, de las festividades y diversos eventos que se pudieron apreciar la semana pasada en Medellín. Quisiera, simplemente, hablar de un aspecto que me llamó la atención y sobre el que estimo conveniente un comentario.
Y se me ocurrió el título de “tomémonos el p’irnos”, porque tiene que ver con el inserto publicitario de la Fábrica de Licores de Antioquia que se entregó con la edición de este periódico el martes 14 de agosto, el último con contenido parecido de los que circularon duran- te las festividades. Repaso algunas de sus páginas. En la primera: “Con el ANFITRIÓN de la FERIA, la FIESTA se LLENA DE FLORES”. Y en ocho páginas tamaño tabloide un nutrido registro fotográfico de igual número de eventos feriales. Algunos con títulos francamente aguardienteros, como “¡QUE VIVA EL DESPECHO! con…”, al que sigue un subtítulo también en mayúsculas: “CANTINAZO PALMAHÍA”; “LA PARRANDA SIGUE con ...”, y un subtítulo así mismo en altas: “FESTIVAL PARRANDERO”. Los puntos suspensivos corresponden, por supuesto, al leit-motiv de la publicación: “con el ANFITRIÓN DE LA FERIA!” O sea, a punta de aguardiente antioqueño. Puro guaro ventiao, mijo.
Me parece que esta publicidad que invita, e incita, a to- mar trago es francamente desproporcionada. E inconveniente. Aceptemos en gracia de discusión que se llame anfitrión de la feria el licor que ha terminado por ser el trago por antonomasia que beben (se toman, mejor) los antioqueños. Deducimos que es la Fábrica de Licores la que pone la plata. Pero, pienso yo, qué hubiera pasado si hubiera sido un empresa tabacalera la que patrocinara la feria, o el nom- bre de cigarrillos registrado, (como nuestro mal recordado Pielrroja). ¿Hubiera aceptado la sociedad sin chistar este despliegue publicitario en favor de un vicio que tanto mal ocasiona a la salud como el tabaco? A la hora de la verdad tan dañino o más es para la sociedad el vicio del trago que el de fumar. Basta pensar, para no ahondar más, en la relación existente entre violencia ciudadana y borracheras.
Y no más. Ustedes perdonan, pero a veces hay que decir la verdad, aunque duela. Habría que empezar por quitar eso de que el aguardiente es el anfitrión de la feria. A mí no me gustaría que hubiera sido invitado a una fiesta y me recibiera borracho el anfitrión. Y con media de guaro en la mano. ¡Salud!
Me parece que esta publicidad que invita e incita a tomar trago es francamente desproporcionada.