Aftosa y el porqué es importante estar libre de esa enfermedad
La actividad ganadera aporta 1,4 % del PIB de acuerdo con las cifras de Fedegán.
Parece mentira, pero que a un ganado se le desprenda el epitelio de la lengua y genere salivación - babeo, síntomas compatibles con la fiebre aftosa, hace que el país esté en riesgo de ser un “paria” para el comercio internacional de carne y ganado en pie, pues la enfermedad genera una amplia mortandad animal y desprestigio en el comercio global (ver Informe).
Esta semana se supo que hubo un segundo brote de la enfermedad en San Diego, Cesar, este año, en un predio constituido por 216 bovinos y 114 porcinos de los cuales 35 enfermaron y 20 murieron.
Un golpe para la diplomacia en esta actividad en la que se ha buscado ser un país referente para el consumo y comercialización de carne y ganado en pie, lo que pone en riesgo un mercado exportador de 110 millones de dólares, en carne y ganado en pie, pero también uno creciente destinado a mejorar la raza para la producción.
Las cifras de la Federación Nacional de Ganaderos muestran que esta economía mueve el 1,4 % del Producto Interno Bruto (PIB), es 21,8 % del PIB agropecuario y el 48 % del PIB pecuario, de ahí su importancia.
Ese segundo suceso de este año fue posterior a la pérdida del estatus de Colombia como un “país libre de aftosa con vacunación”, tras encontrar un primer hallazgo en Sogamoso (Boyacá), en un hato conformado por 18 animales, de los cuales una vaca mayor de tres años, que presentó los síntomas y reincidir en ellos, tras una estricta vigilancia que se presentaba en la zona desde 2017 por la presentación de indicios (ver Dicen de...).
La enfermedad, que es solamente animal y no produce ningún efecto en el ser humano, reapareció el año pasado, en el país, y según el ministro de Agricultura, Andrés Valencia, se dio por el ingreso de ganado en malas condiciones de salud proveniente de Venezuela. De hecho, estos dos sucesos recientes guardan una relación directa con aquel foco del año pasado, de acuerdo con la teoría del jefe de la cartera.
César Augusto Gómez, médico veterinario y docente de la Facultad de Ciencias Agro- pecuarias de la Universidad de La Salle, recordó que en 2017 los brotes se dieron en la vereda de Curipao, Tame (Arauca) y en Cundinamarca.
Un aspecto que trae a valor presente el profesor es la Feria de Agroexpo que se realizó en el Tame pese al riesgo de propagación de la enfermedad. En su momento se sacrificaron 297 reses.
La importancia de ser libre
Ser libre de aftosa con vacunación es como tener una visa de ingreso a diferentes países y competir en Suramérica de la mano de grandes productores de carne como Brasil, Argentina y Uruguay, según el profesor Gómez.
“Ante cualquier brote se cerrará el comercio y los animales en riesgo, tendrán que ser sacrificados, eso afecta la productividad de los ganaderos y del Estado, que en algunos casos deberá cumplir con una indemnización al ganadero al tener un programa de erradicación de fiebre aftosa”, dijo el profesor.
También se cierran los frigoríficos y los puntos de embarque de las zonas que entran en contingencia.
Según el análisis realizado
por Ricardo Sánchez, presidente de la Unión Nacional de Asociaciones Ganaderas de Colombia (Unaga), hay unas importantes e inmediatas consecuencias sobre las exportaciones del ganado en pie y carne de canal.
“El mayor impacto negativo del foco sería en 2019, ya que se frenaría el dinamismo en las exportaciones en canal, e indirectamente, en las que se realizan en pie, por la pérdida del estatus sanitario”, afirmó Sánchez.
Aunque lo cierto es que nada de esto ha sucedido aún, según aclaró Juan Fernando
Martínez, gerente del Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) en Antioquia: “El país en cabeza del Ministerio de Agri-
cultura está haciendo diplomacia sanitaria para que evitar que nos cierren mercado; no hemos sido notificados de alguna situación de esta”.
Perú y Chile se habían abierto como mercados de exportación de carne de acuerdo con una información del Ministerio de Agricultura, en julio de este año, pero además a principios de 2018 se anunció Israel como nuevo destino con al menos otros mercados con posibilidades de aumentar la participación, entre ellos Egipto, Jordania, Libia, Líbano, Georgia, Emiratos Árabes Unidos, Rusia, Bielorrusia, Kazajastán, Kirguistán, Curazao, Angola y Cuba.
A agosto de 2018, el princi-
pal destino de exportación fue Rusia con 8.685 toneladas de carne, seguido por líbano (1.346), Jordania, con 981, y Hong Kong (917); el total de ventas al exterior fue de 13.247 toneladas, según José Félix La
faurie, presidente de Fedegán. En Ganado en pie, los mercados más representativos fueron Irak, con 16.391 cabezas, el Líbano con 14.619 cabezas y Jordania, con 9.895 cabezas; la cifra general alcanzó los 40.905.
Ante estos nuevos brotes, el Ministro de Agricultura ha realizado viajes para que no les sean cerrados los mercados a Colombia, pero este es un importante temor de la industria. Más aún que se siga propagando la enfermedad por fallas en las zonas de contención, sobre todo para áreas como Antioquia, Caldas y la zona de influencia del Magdalena medio.
¿De quién es la culpa?
Para Lafaurie la respuesta es clara, el Gobierno pasado y quienes ahora realizan la vacunación, del Ministerio de Agricultura: “Politizaron eso, con el afán de tener recomendados políticos y a la final lo que terminaron es con la locura con la estamos. La última vez que nosotros vacunamos, fue el último ciclo de 2015”.
El dirigente gremial plantó la sospecha sobre la congruencia sobre el censo y las
vacunas; hay más terneros que vacas, los grupos etarios no coinciden: “eso es un desastre no se sabe quién vacunó, ni dónde”, agregó.
Martínez aseguró que estas suspicacias podrían ser erradas si se tiene en cuenta que la vacunación ha aumentado en los ciclos y que los brotes se han dado por el contrabando: “Los que están vacunando son los mismos comités ganaderos, que ante-
riormente trabajaban con Fedegán y hoy con la Cuenta Nacional de Carne y Leche, no ha cambiado mucho la gente que está operando los ciclos de vacunación”.
El profesor y médico veterinario de la Universidad de la Salle, agregó que si bien hay unos ganaderos irresponsables que botan las vacunas, lo que “entienden la ganadería saben que proteger a los animales sobre la fiebre aftosa es
una gran ventaja para la productividad y la multiplicación poblacional de la finca.
Sobre todo, advirtió, hay que ponerle atención a “los cerdos, bovinos, los caprinos los bufalinos, que no tenemos un control certero sobre esos animales y sobre todo los ovinos puede ser un nicho riesgo para que la fiebre aftosa se propague”, dijo Gómez.
Y también la invitación es a que los predios pequeños va-
cunen siempre. La frontera, que es responsabilidad de las autoridades para que la cuiden del ingreso de ganado enfermo, debe ser una prioridad