UN NEGOCIO DE GRANDES JUGADORES
“Se trata de la línea DiamanteCharlone de 487 kilómetros de longitud a 500 kilovoltios y 422 kilómetros a 132 kilovoltios, entre Mendoza y Buenos Aires, que tiene dos subestaciones asociadas. Se espera la licitación salga este mes y que esté definida en el primer trimestre del año entrante”.
Con esa intención latente, ¿qué análisis hacen de la crisis que afronta Argentina?
“Hemos mirado esto con mucho cuidado desde el punto de vista de riesgo país, lo hemos hecho desde la administración y miembros de nuestra junta directiva han estado hablando con las autoridades. Tenemos que mirar todo con calma, y esta primera tiene unos contratos que ofrecen a los inversionistas protecciones muy interesantes de riesgo país, que nos permiten entrar
con tranquilidad”.
Mencionó que en el radar está México, aunque con recato...
“Los analistas políticos nos hablan del entusiasmo que los inversionistas internacionales ven en él y de la euforia que hay a su alrededor, pero a nosotros no nos gusta eso porque somos muy mediditos y muy conservadores. No obstante, sí pensamos que las oportunidades en Brasil con Bolsonaro son claras. Es un tipo que es pronegocios, le interesa que las cosas se hagan desde el ámbito privado y pienso que las señales que está dando y de lo que ya se sabe del gabinete, van en esa dirección. Así que en Brasil va a haber un período de crecimiento y de euforia, o de entusiasmo, por decirlo, interesante, y eso es bueno porque las condiciones para los inversionistas extranjeros van a persistir y van a estar allí presentes de una manera dinámica. Lo malo es que todos querrán estar allá y Para ISA es claro que las condiciones de llegada a nuevos mercados son complejas. Hay una mayor competencia. En Brasil, este año, de 20 proyectos eléctricos subastados ocho los ganó un jugador indio (Sterlite Power Grid Ventures Limited). Los chinos llegaron a Colombia para una proyecto de generación en el Chocó y van a seguir llegando. En Chile, en el sector eléctrico recientemente, grandes jugadores franceses ganaron varias iniciativas con ofertas en las que las rentabilidades, aparentemente, negativas. En ese escenario la presencia de esos competidores van a presionar los márgenes y ha dificultar las negociaciones.
aprovechar las oportunidades” (ver Paréntesis).
Con un horizonte tan amplio, ¿cómo son las cuentas de las inversiones?
“Antes de que saliera la estrategia a 2030, ya teníamos comprometidos más o menos 4.500 millones de dólares en inversiones de aquí al 2023. En total estamos pensando en unos 8.100 millones de dólares”.
Y para esas apuestas, ¿se buscarían socios estratégicos?
“El Grupo ISA hace un esfuerzo de acercarse a inversionistas grandes en la región. Estuve este año en Nueva York, hablando con potenciales inversionistas y también en Canadá, así que tenemos una cantidad de líneas de diálogo abiertas. Hoy en día no sé quién sería el aliado, porque tenemos que ajustar planes. También hemos tenido reuniones con jugadores eléctricos en Italia e incluso chinos”.
El hecho de que la mayoría accionaria de ISA sea del gobierno, ¿no espanta a esos inversionistas?
“Pues nos hacen preguntas, pero cuando somos campeones en gobierno corporativo, eso nos permite mirarlos a los ojos, así que si hubiera algún mensaje de que hay injerencia política o injerencia administrativa que nos minara el gobierno corporativo, sería más difícil”.
ISA fue el primer estructurador de las vías 4G en el país, ¿cuándo entrará de ello en ese negocio?
“Desde hace años estamos mirando, permítame el coloquialismo, todo lo que se mueve, y si se nos dan cosas yo creo que de aquí a mediados del año entrante estaremos en ese negocio, ojalá, entrando en ese sector. No nos asusta llegar a ese mundo de la infraestructura de carreteras porque si hemos sido impecables en el transporte de energía y aplicamos los mismos principios de ética lo podemos hacer bien. Sería aire fresco, en Perú y en Colombia, que una compañía como ISA llegara al sector”