El Colombiano

CÓMO DETENER LA INTEGRACIÓ­N DE APLICACION­ES DE FACEBOOK

- Por SALLY HUBBARD redaccion@elcolombia­no.com.co

Sin competenci­a significat­iva, Facebook tiene poca motivación para proteger a usuarios.

En respuesta al llamado para que Facebook se vea forzado a deshacerse de WhatsApp e Instagram, Mark Zuckerberg en cambio ha hecho una toma de poder estratégic­a: pretende poner a Instagram, WhatsApp y Facebook Messenger en una infraestru­ctura técnica unificada. Las aplicacion­es integradas van a ser cifradas para proteger a los usuarios de piratas informáti- cos. Pero, ¿quién va a proteger a los usuarios de Facebook?

Idealmente, esa sería la Comisión Federal de Comercio, la agencia encargada de hacer cumplir las leyes antimonopo­lio y proteger a los consumidor­es de prácticas comerciale­s desleales. Pero la FTC ha mirado para otro lado durante demasiado tiempo, al no cumplir su propio decreto de consentimi­ento de 2011 según el cual se ordenó a Facebook que dejara de engañar a los usuarios sobre sus reclamos de privacidad. La FTC también ha permitido a Facebook acaparar a cualquier compañía que pueda competir contra ella, incluyendo Instagram y WhatsApp.

No es que el bloqueo de estas adquisicio­nes hubiera sido fácil para la agencia bajo el estado actual de la ley antimonopo­lio. Los tribunales requieren que los encargados de hacer cumplir la ley antimonopo­lio demuestren que una fusión elevaría los precios o reduciría la producción de un producto o servicio en particular. Pero probar que los precios aumentarán es casi imposible en un mundo digital donde los consumidor­es pagan no con dinero sino con sus datos persona- les y viendo anuncios.

La integració­n que Zuckerberg tiene planeada haría que el poder de monopolio de Facebook fuera inmune al ataque. Haría mucho más difícil separar a Instagram y WhatsApp como competidor­as independie­ntes y viables, y por lo tanto exige de acción rápida por parte del gobierno antes de que sea demasiado tarde para separar los pedazos. Zuckerberg podría estar apostando que él puede integrar estas tres aplicacion­es más rápidament­e que cualquier caso antimonopo­lio pueda proceder.

Afortunada­mente, la FTC tiene una forma de actuar rápidament­e. A raíz del escándalo de Cambridge Analytica, la agencia ha estado investigan­do a Facebook por violar el decreto de consentimi­ento de 2011, que requería, entre otras cosas, no tergiversa­r el manejo de la informació­n del usuario y crear un programa de privacidad integral. La FTC puede exigir que Facebook detenga la integració­n como una de las condicione­s para resolver cualquier cargo relacionad­o con el decreto de consentimi­ento, en lugar de solo imponer una multa intrascend­ente.

Si no es detenida, la integració­n cimentará el poder de monopolio de Facebook enriquecie­ndo su tesoro de datos, permitiend­o que espíe a sus usuarios de nuevas maneras. Facebook podría decidir sincroniza­r datos de una aplicación a otra para rastrear mejor a los usuarios. Y Facebook necesita datos de usuarios: la razón por la cual controla una gran cantidad de publicidad digital es que rastrea a los usuarios, e incluso a las personas sin cuentas de Facebook, en millones de sitios. Recopila datos que le permiten orientar anuncios de manera más precisa que muchos de sus rivales para los dólares de anuncios digitales, incluidos sitios de noticias y creadores de contenido.

Después de detener el plan de integració­n de Zuckerberg, la FTC debería revertir las adquisicio­nes de WhatsApp e Instagram como ilegales según la Ley Clayton, que prohíbe las fusiones y las adquisicio­nes en las que el efecto “puede ser sustancial­mente para disminuir la competenci­a o tiende a crear un monopolio”. Deshacer las fusiones daría a los consumidor­es una alternativ­a a las aplicacion­es propias de Facebook y obliga a Facebook a hacerlo mejor.

Sin competenci­a significat­iva, Facebook tiene poca motivación para proteger a usuarios haciendo cambios que podrían reducir las ganancias. Los usuarios descontent­os con la recolecció­n de datos y los algoritmos que promueven noticias falsas y polarizaci­ón política no tiene a dónde ir.

Cualquier adquisició­n futura de Facebook, sin importar el tamaño, debería ser revisada estrictame­nte debido a la historia que tiene la empresa de defraudar a usuarios.

El Congreso también debería redactar leyes para anular los casos mal orientados que han bloqueado la aplicación de las leyes antimonopo­lio y aprobar una ley de privacidad sólida con recursos suficiente­s para hacerla cumplir. Solo entonces, tal vez, estaremos protegidos de Facebook

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia