La música que viaja en el bolsillo tiene una
El Walkman, que cumplió 40 años, fue el precursor de los reproductores portables. ¿Va a resurgir?
Una acción hoy tan común como buscar esa canción que da felicidad o la que ayuda a recordar algo con tristeza y escucharla camino a casa en el bus o durante una caminata, era imposible hace 40 años.
Existía el radio (el gadget), claro, y podía llevarse a cualquier lugar, pero no funcionaba como reproductor del formato más popular por esos días, el casete. Y ponerse una grabadora al hombro no era tan cómodo.
Entonces si alguien quería tomar un casete de Miguel Bosé y escuchar Amor mío
¿cómo estás? o uno de los Bee Gees y hacer sonar Night fever mientras caminaba, no podía. Tenía que ir a casa.
Por esa razón, el 1 de julio de 1979, apareció el Walkman, un invento de la empresa japonesa Sony. Se trataba de un dispositivo que permitía cuatro cosas al introducirle una cinta: reproducir, adelantar, atrasar y detener la música; además, tenía dos puertos para audífonos.
El primer modelo fue bautizado como TPS-L2, era de colores gris y azul metálico, según Sony, “para simular los pantalones de mezclilla azules de moda”.
Un legado
La compañía japonesa tiene un apartado especial dedicado al reproductor musical en su página web para Colombia. Ahí cuentan que cuando el equipo se presentó “algunos se mostraron escépticos, ya que era diferente y poco familiar. (...) La idea de un reproductor de música portátil sin una función de grabación era desconocida. Sin embargo, no tardó mucho para que los entusiastas de la música reconocieran el ingenio del Walkman”.
El lanzamiento de este equipo tuvo una gran relevancia en el mundo. Por primera vez se logró que la música que se escuchaba en un determinado formato fuera portable para el usuario.
Información compartida por la firma de análisis de mercado Statista señala que el Walkman fue “un gamechan
ger (cambiador de juego) total. Liberó a los amantes de la música del mundo de las cadenas de poder escuchar sus canciones favoritas en casa o mientras conducían un automóvil”.
Del reproductor se vendieron un poco más de 200 millones de unidades en el mundo. El éxito fue innegable, otras empresas como Toshiba, Panasonic y JVC sacaron sus modelos, pero no podían lla
marlos con el nombre con el que los bautizó Sony porque esa era una marca registrada; sin embargo, para la gente, todos eran Walkman.
Y a pesar de ese éxito, en octubre de 2010 la empresa japonesa anunció que su dispositivo estrella dejaría de fabricarse. La causa: nuevos formatos y equipos para escuchar que lo volvieron obsoleto.
Nuevos gadgets
Fue la misma compañía nipona la que comenzó la evolución del reproductor cuando la música que se grababa y comercializaba pasó del casete al Compact Disc. Así, en 1984 presentó el Discman D50. “Fue fundamental para acelerar la popularidad del CD”, señala Sony.
Y así se dio. En los 90 el Compact Disc era el formato rey. El profesor de Ingeniería en TIC de la Universidad Pontificia Bolivariana, Ricardo Za
pata, afirma que “se da una revolución en el audio porque se pasa de los formatos analógicos (LP y Casete) al digital”, y eso era toda una novedad, además de que la calidad del sonido, con el CD, mejoraba considerablemente.
Y otras revoluciones llegarían después, en 1998, 2000, 2001 y 2007, con el surgimiento, respectivamente, del Mp3, el teléfono móvil, el iPod y el teléfono inteligente. Cada uno trajo una nueva manera de oír canciones.
El más reciente, el smartphone, gracias al desarrollo de aplicaciones y a la evolución de las velocidades de Internet, involucró a las personas en la llamada era del
streaming. Ya no es necesario
comprar música en físico o descargar una canción, todo está internet.
Félix Tircher, periodista de datos de Statista, indica: “Gracias a los teléfonos inteligentes, el streaming y los auriculares inalámbricos, la música es ahora más portátil que nunca”.
Un resurgimiento
El Walkman es considerado el padre de la música portable, un padre joven, de apenas 40 años.
Y como lo vintage está de vuelta en la tecnología, como se ha visto con el LP y con las consolas que Nintendo ha relanzado, más de 20 años después, una compañía decidió presentar un reproductor de casete con una novedad: tiene Bluetooth para conectar los auriculares.
El desarrollador es la compañía Ninm Lab y lo llamó It’s
ok. La financiación para traer
lo de regreso a final de este año la consiguió por medio de donaciones hechas a través de la plataforma kickstarter.
It’s ok promete ser el primer “Walkman” con Bluetooth y puerto para audífonos. ¿Le irá tan bien como a su padre?