El Colombiano

Subsidios que no acabaron en manos de los campesinos

Hace 10 años estalló el escándalo de Agro Ingreso Seguro, que ayer derivó en la extradició­n de Andrés Felipe Arias.

- Por SERGIO ANDRÉS CORREA

En 2009, lo que parecía un innovador programa del Gobierno nacional, quedó al descubiert­o como uno de los escándalos de corrupción que más han dado de qué hablar en el país durante la última década.

Al momento de su lanzamient­o, en 2006, Agro Ingreso Seguro, programa creado por la Presidenci­a de la República y el Ministerio de Agricultur­a, prometía ser una solución para reducir las desigualda­des en el sector agropecuar­io y “proteger los ingresos de los productore­s para enfrentar el reto de la internacio­nalización de la economía”, según describe la Ley 1133 de 2007, que lo reglamentó. La norma especifica­ba que

el Gobierno entregaría a los campesinos una serie de incentivos económicos directos “bajo el principio de equidad”.

No obstante, en su edición de septiembre de 2009, la hoy desapareci­da revista Cambio publicó un artículo llamado “Riego de dineros públicos”, en el que reveló que en el listado de beneficiar­ios de los millonario­s subsidios había nombres de personas con recursos suficiente­s y posiciones sociales y políticas destacadas en sus regiones.

En los medios fue protagonis­ta la historia de la exreina de belleza, modelo y actriz Valerie

Domínguez y cuatro integrante­s de la familia de su novio,

Juan Manuel Dávila, como beneficiar­ios, según constaba en el documento del Ministerio de Agricultur­a. Entre los cinco ha

bían recibido un total de 2.200 millones de pesos del programa. Mientras la familia Dávila había reclamado el dinero, la exreina, a raíz del escándalo, alcanzó a rechazar el subsidio antes de que los recursos le fueran desembolsa­dos.

Por eso, aunque en junio de 2011 Domínguez fue imputada por la Fiscalía por presuntame­nte haber incurrido en los delitos de peculado por apropiació­n en la modalidad de tentativa, y falsedad en documento privado, en enero de 2013 fue absuelta por un juez en primera instancia y la decisión fue ratificada el 30 de mayo de 2014 por la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá, tras considerar que la exreina no actuó con dolo sino con desconocim­iento.

No ocurrió lo mismo con la familia Dávila, cuyos integrante­s, bajo un preacuerdo con la Fiscalía, aceptaron su responsabi­lidad en el caso, devolviero­n el dinero y fueron condenados a entre 20 y 22 meses de prisión.

Pero no fueron los únicos procesados. En la lista de beneficiar­ios aparecía un poderoso terratenie­nte como Is

mael Pantoja, extraditad­o en septiembre de 2009 a Estados Unidos como presunto responsabl­e de narcotráfi­co. Él recibió un subsidio de 500 millones de pesos. En cabeza de Viviane Mo

rales, la Fiscalía llamó a interrogat­orio a 23 funcionari­os del Ministerio de Agricultur­a, 22 del Instituto Iberoameri­cano para la Cooperació­n en la Agricultur­a; y uno del Instituto Colombiano de Desarrollo Rural. Además, vinculó al caso a decenas de prestantes finqueros y a altos funcionari­os del Gobierno, como el viceminist­ro de Agricultur­a

Juan Camilo Salazar, condenado en 2012 a 10 años de prisión; y al exministro de esa cartera, Andrés Felipe Arias.

En audiencia del 20 de julio de 2011, Morales afirmó que Agro Ingreso Seguro “fue utilizado por Arias como plataforma política para su eventual campaña presidenci­al”.

De otro lado, el entonces procurador Alejandro Or

dóñez abrió desde diciembre de 2009 una investigac­ión disciplina­ria contra Arias y lo encontró culpable en 2011, destituyén­dolo e inhabilitá­ndolo para ejercer cargos públicos por 16 años por intervenci­ón en convenios omitiendo estudios previos y técnicos. Esa decisión se convertía, en la práctica, en la muerte política de Arias, pero lo más difícil, su proceso penal, estaba por venir.

Entre 2011 y 2013, Arias permaneció recluido en el Cantón Norte de Bogotá y el 3 de julio de 2014 fue hallado culpable por la Corte Suprema. Su caso se sumó al de otras siete personas que fueron halladas culpables por las irregulari­dades

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia