Es urgente reestructurar el sistema EnCicla para que crezca
La movilidad sigue siendo el gran reto de sostenibilidad en nuestra ciudad-región. Ya no es pertinente priorizar el transporte individual motorizado. En el próximo cuatrienio, debe ser prioridad implementar los corredores del Metro en la 80 y en la 34. Con respecto al primero, el tranvía debe construirse sin reposición de carril, precisamente para asegurar que el sistema público no tenga que competir con el transporte individual motorizado. Con respecto al segundo, se espera que una nueva conexión sur-norte libere presión de la línea A del Metro, conectando orígenes y destinos vitales en el
oriente de la ciudad. Se requiere invertir decididamente en la bicicleta, con el objetivo de lograr el 10% de viajes diarios que se trazó el Plan Maestro Metropolitano de la Bicicleta para el 2030. Esto implica que además de construir entre 120 y 150 nuevos kilómetros de ciclorruta segregada en el valle de Aburrá, será urgente reestructurar el sistema EnCicla, para retomar la senda de crecimiento, cobertura y calidad. En consonancia con la Ley 1811 de 2016 se deben implementar estrategias para promover la multimodalidad de cara al Sitva, y para generar incentivos que logren montar a la bicicleta tradicional (o eléctrica) a muchos más servidores públicos. También es momento para otras estrategias de rápida implementación. El próximo gobierno debe promover el teletrabajo y el escalonamiento horario. Esto implicará que miles de viajes diarios se puedan dejar de hacer o moverlos para horas por fuera de los picos. Así mismo, será necesario definir los cronogramas para la transición que permita prohibir del uso del diésel en la ciudad (urgente para nuestra calidad del aire), y de la puesta en marcha de un sistema de cobros por congestión, que reemplace el anacrónico pico y placa.