Eterna espera por una casa de interés social
Los proyectos de vivienda nueva de interés social de la Alcaldía de Medellín están enredados y presentan serios retrasos. Este es el panorama.
Al menos cinco de 11 proyectos de la Alcaldía de Medellín están frenados o no han iniciado. Las familias temen perder los subsidios. Radiografía.
Ni una comisión permanente en el Concejo de Medellín, ni las investigaciones de la Personería han logrado destrabar los líos de por lo menos cinco de los 11 proyectos de vivienda gestionados por el Instituto de Vivienda de Medellín, Isvimed, que llevan varios años paralizados y con familias esperando una solución definitiva para vivir tranquilos.
En seis de ellos —los más grandes— están comprometidos los ahorros y subsidios de 3.510 familias; y apenas en dos casos las obras ya arrancaron (ver recuadros).
Isvimed tiene a su cargo el cumplimiento de 29 indicadores del plan de desarrollo relacionados con soluciones de vivienda definitiva, vivienda nueva, arrendamiento temporal y mejoramiento de vivienda. Solo 14 tienen un avance mayor, señala la concejal María Paulina Aguinaga, que les ha hecho seguimiento a las denuncias.
Según datos entregados por la entidad al Concejo de Medellín en febrero de este año, el presupuesto para 2019 es de $125.127 millones, frente a $230.154 del año pasado. El Instituto dijo que en 2019 espera terminar la construcción de 1.087 casas de interés prioritario (VIP) repartidas así: 100 en el proyecto Bosque Verde, 424 en Montaña y Cascada, 448 en Ciudad del Este y 114 en Arboleda de San Antonio.
Sin embargo, en los documentos enviados por Isvimed a EL COLOMBIANO se asegura que Ciudad del Este solo estará listo en junio de 2020, mientras que Arboleda de San Antonio estaría para entrega en agosto de 2020. La entidad no tuvo vocero disponible para este reporte.
Pero más allá de los subsidios que otorga el Isvimed, el indicador de viviendas entregadas y legalizadas es, para Aguinaga, el que permite entender cuántas familias realmente tienen casa nueva. Y aquí volvemos al documento remitido por el Instituto al Concejo, en el que se da cuenta de que en 2017 fueron 103; en 2018, 72 y las proyectadas para finalizar 2019 son 101.
“Esto demuestra que en muchos casos la asignación de subsidios no se materializa en una vivienda”, criticó la corporada.
Proyectos enredados
La situación es preocupante, asegura el concejal Bernardo Guerra, quien ha incluido algunos proyectos de vivienda del Isvimed dentro de las presuntas estafas inmobiliarias. “Pero estamos hablando de casas de interés prioritario, para familias de escasos recursos. Es tan grave la situación que hay un proyecto que está denunciado desde hace cinco años y, aunque se han desembolsado millonarios recursos, no se ven los avances”, comentó el corporado.
Guerra hace referencia a Torres del Este, que está ubicado en la comuna 9 (ver recuadro). Según los documentos publicados en 2014 por Isvimed, este proyecto era de interés prioritario para ahorradores; es decir, los beneficiarios no podían ganar más de dos salarios mínimos y debían tener ahorrado el 5 % de lo que costaba la vivienda.
Inicialmente se contemplaba que fueran 848 viviendas, pero los problemas con el terreno —que obligaron a modificar los diseños— y el hecho de que varias familias no cumplían con los requisitos, se redujo a casi la mitad.
Edwin González, vocero de los compradores del proyecto, sostuvo que los beneficiados con estas viviendas están “asfixiados” económicamente porque además del ahorro, muchos hicieron créditos para
pagar el resto del valor de sus casas que, en teoría, estarían en menos de un año. “Entonces imagínese: pagan el crédito, tienen comprometidos sus ahorros y cesantías, y además
están pagando arriendo”.
El vocero confirmó que en 2014 se postularon para ser beneficiarios de viviendas de interés prioritario (precio igual o inferior a 70 salarios mínimos). “Nos asignaron el subsidio y todo empezó a salir mal. Por muchas razones el proyecto se demoró para poner el primer adobe: apenas en 2016 se iniciaron las obras y nos prometieron que estaría lista en 2017”, contó.
Cuando esperaban la llamada para recibir las llaves de su casa, recibieron un documento en el que les decían que la entrega solo podría hacerse en 2018.
“Ahí hubo toda clase de problemas con el terreno, incluso unos deslizamientos y nosotros dijimos que entendíamos y que íbamos a tener paciencia hasta mayo de
2019, pero otra vez nada pasó”, agregó el vocero de los afectados. El problema, precisó, es que como el salario mínimo y la inflación han subido, el valor que deberán pagar también se incrementa.
Su petición es que les permitan reunirse con la Unión Temporal Medellín para crear un otrosí con fechas definitivas para la entrega. Adicionalmente que les permitan conocer quiénes más son beneficiarios. “De los 448 propietarios solo hemos logrado identificar a 200. Por eso quiero hacer un llamado para que los demás se comuniquen al Whatsapp 3104970248 para ver qué podemos hacer juntos”, dijo.
Hoy los candidatos a la Alcaldía de Medellín incluyen en sus programas de gobierno la construcción de vivienda, en cifras que van hasta 10.000 nuevas unidades habitacionales. La pregunta que queda, ante este panorama, es si podrán cumplir con esos compromisos, considerando los problemas, retrasos y sobrecostos de los que están hoy en ejecución, y que tienen en vilo a más de 3.000 familias