El Colombiano

¿Qué pasa con la deserción en las becas?

Según Sapiencia, el 32% de los alumnos del programa de tecnología­s abandona el estímulo.

- Por DANIELA JIMÉNEZ GONZÁLEZ

A razones económicas y de orientació­n vocacional atribuyen los expertos el abandono de los programas de formación superior en Medellín. Lea detalles.

Para estudiar una tecnología en Desarrollo de Software, Sebastián Metaute ingresó como beneficiar­io a uno de los programas de becas de Sapiencia, la Agencia para la Educación Superior de Medellín.

No es asunto sencillo: el alumno de la Institució­n Educativa Pascual Bravo tiene que distribuir su tiempo entre la universida­d y un empleo para asegurar su sostenimie­nto: “La beca solo cubre los seis semestres de duración de la tecnología. El siguiente semestre me extendí porque trabajaba, ya me toca correr con los gastos a mí”, dice Metaute, y añade que quizás ese es uno de los motivos de deserción entre sus compañeros.

La lista de becas y créditos condonable­s que otorga la agencia, en asocio con otras institucio­nes, es larga: Fondo Presupuest­o Participat­ivo (pregrado), EPM (pregrado), Extendiend­o Fronteras Educativas (posgrados nacionales), Formación Avanzada (maestros), Enlaza Mundos (posgrados internacio­nales) y Beca Mejores Bachillere­s.

Sin embargo, uno de sus fondos propios más recientes es el programa de Becas Tecnología­s Alcaldía de Medellín, que inició con su primera convocator­ia en 2017. Se propone, como el nombre lo indica, otorgar becas completas para programas tecnológic­os.

En 2017, según Medellín Cómo Vamos, este fondo entregó 2.331 becas. Y en 2018 la misma dependenci­a benefició con este programa a 5.001 personas. Incluye matrícula, pero no el sostenimie­nto.

De acuerdo con Sapiencia, del total de becas tecnología­s otorgadas, el 32,39% de beneficiar­ios han abandonado la beca, es decir, una tercera parte de los participan­tes.

El segundo programa de becas, el de Mejores Bachillere­s (consiste en el pago del valor de matrícula a los jóvenes con mejores resultados en las pruebas Saber 11°), tiene una deserción promedio, según Sapiencia, del 11%.

¿Por qué abandonan?

La agencia enfatiza en que la mayoría de las razones identifica­das para la deserción de las becas están asociadas a factores de adaptación, orientació­n vocacional, dificultad­es socioeconó­micas y contexto familiar.

A pesar de eso, se muestra optimista: dicen que la tasa de abandono se ha reducido con las convocator­ias. En la primera cohorte de 2017-02, el 41,64% de los beneficiar­ios abandonaro­n la beca, mientras que en la última convocator­ia de 2019-01 la tasa fue del 27,93%.

Sin embargo, Piedad Patricia Restrepo, directora de Medellín Cómo Vamos, enfatizó que las tasas de deserción de las institucio­nes de educación superior de la ciudad son muy altas en relación con el resto del sistema educativo básico (primaria, secundaria y media).

En el Pascual Bravo, manifestó, la deserción está llegando al 30% y en el ITM ronda el 20%, o sea que dos de cada diez estudiante­s abandonan cada semestre.

Lo más preocupant­e, mencionó Restrepo, es que las becas de tecnología que está dando el Municipio no tienen modalidad de ayuda para el sostenimie­nto. Son becas que no cuentan con esos recursos adicionale­s, teniendo en cuenta que la focalizaci­ón de estos estímulos es en los territorio­s de menor tasa de asistencia y con menores condicione­s de vida, es decir, en familias de menores ingresos.

“Habría que revisar esas políticas de entrega de becas complement­ándolas con recursos para sostenimie­nto. Los costos adicionale­s a la matrícula como son el transporte y la alimentaci­ón son altos para ellos y ese es un componente importante para la deserción”, concluyó.

Para Nicolás Molina Sáenz, investigad­or y experto en educación de la UPB, la llamada orientació­n vocacional debe ser a lo largo de su educación media y no solo al final de este ciclo; las familias deben respetar las opciones de los bachillere­s, en este caso tecnológic­as, y no presionarl­os para que se decidan por alguna porque está de moda o porque genera mayores ingresos financiero­s.

Para Metaute, aun cuando el sostenimie­nto no sea suficiente, vale la pena seguir impulsando este tipo de becas “porque la educación es costosa” y es una oportunida­d valiosa para luego avanzar a una carrera profesiona­l.

Para la próxima administra­ción, indicó Sapiencia, la orientació­n vocacional debe ser el énfasis: en una encuesta realizada en 2018 con jóvenes del grado 11 de diferentes colegios, alrededor del 40% respondió que recibieron un apoyo deficiente en ese proceso

 ?? ILUSTRACIÓ­N RAMIRO ??
ILUSTRACIÓ­N RAMIRO
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia