Nicaragua podría salir de la OEA
Un informe de una comisión diplomática de la Organización de Estados Americanos (OEA), publicado ayer martes, concluyó que existe una “alteración del orden constitucional que afecta gravemente el orden democrático en Nicaragua”, lo que acerca al país centroamericano a su expulsión del organismo.
En el documento, la comisión reconoce que sus gestiones con el Gobierno del presidente nicaragüense, Daniel
han sido “infructuosas” y, por ello, pide la convocatoria “inmediata” de una Asamblea General de la OEA, el foro supremo del organismo que reúne a los cancilleres del continente.
En esa reunión de carácter extraordinario, los titulares de Exteriores pueden optar por proponer la suspensión de Nicaragua, la mayor forma de sanción de la OEA, que, en 70 años de historia, solo se ha usado en dos ocasiones: con Honduras, en 2009, después del golpe de Estado; y con Cuba tras el triunfo de la Revolución de Fidel Castro, en 1959.
En el documento la organización reseña casos de acoso e intimidación a la oposición, violación de los derechos políticos de las personas y a la libertad de expresión, tratos inhumanos y detenciones arbitrarias de las autoridades del régimen, subordinación del Estado por parte del Ejecutivo y afectaciones al orden constitucional en el país.
Con ese panorama, el grupo de la OEA aseguró que, con la premisa de restablecer el sistema democrático, es “imprescindible” realizar cambios institucionales, comenzando por una reforma al sistema electoral “que permita la celebración de elecciones justas, libres y transparentes”.
De no acoger las recomendaciones, Nicaragua podría ser expulsado del organismo, que en su momento intentó mediar para resolver la crisis del país