AL PRESIDENTE TRUMP SE LE DESPOJÓ DE SU DERECHO AL DEBIDO PROCESO
Representante a la Cámara, republicano, por Wisconsin. Aparte de la columna publicada en The New York Times.
Después de evaluar las acusaciones contra el presidente Donald
Trump y el proceso que nos llevó hasta aquí, determiné que no podía votar para destituir.
A principios de este Congreso, Nancy Pelosi, la presidenta de la Cámara, y Jerrold Nadler, el presidente del Comité Judicial, establecieron criterios para emprender un juicio político. Dijeron que la evidencia tendría que ser abrumadora y convincente y, lo que es más importante, tendría que ser bipartidista.
Apenas momentos después de que el presidente Trump prestó juramento, The Washington Post tituló: “La campaña para acusar al presidente Trump ha comenzado”. Peor aún, 103 miembros actuales del Caucus Demócrata de la Cámara votaron para avanzar con juicio político incluso antes de la
llamada telefónica del presidente Trump el 25 de julio con el presidente ucraniano
Volodymyr Zelensky.
El presidente Trump ha sido despojado de sus derechos de debido proceso legalmente protegidos. No hubo una investigación independiente. Un proceso injusto no puede llevarnos a la verdadera justicia.
El verdadero daño causado por todo esto es el precedente que establece. El presidente Trump, si es juzgado en el Senado, probablemente será absuelto. Los padres fundadores temían que algún día la acusación pudiera ser utilizada por razones exclusivamente partidistas. Durante 230 años, el Congreso había combatido esa tentación. Desafortunadamente, en 2019, algunos dejaron que su desdén por el presidente Trump nos llevara por este camino ■