Menos gasto de agua y luz, reto para construcción
Según Camacol, la meta es disminuir el consumo en las edificaciones entre 20 % y 25 % respecto a años anteriores.
Las buenas perspectivas para el sector constructor antioqueño este año, los retos que vienen en esa industria y el trabajo en materia de sostenibilidad fueron algunos puntos destacados en la agenda de la 63 Asamblea de Afiliados de Camacol, ayer, en Medellín.
El hecho de que la construcción represente uno de los motores de la economía paisa como lo muestran las proyecciones de la Cámara de Comercio de Medellín (según las cuales el Producto Interno Bruto de la región crecería 3,5 % este año), va de la mano con el trabajo de esa industria para expandirse de forma sostenible.
“Nos enfocamos en el diseño y la construcción de elementos y equipos que ayuden a la reducción del consumo de energía y agua en las nuevas edificaciones entre 20 % y 25 % frente al de años anteriores”, apuntó Eduardo Loaiza gerente de Camacol Antioquia.
Añadió que se han capacitado más de 3.000 profesionales del sector para prevenir malas prácticas durante los procesos de construcción y que “se han creado departamentos de gestión ambiental en las empresas”.
Además, refiriéndose a temas de coyuntura, el gerente regional comentó que hay 600.000 metros cuadrados de edificaciones no residenciales para iniciar en Antioquia.
“Nosotros le apuntamos este año a un crecimiento en venta de vivienda de por lo menos 5 %, llegando a casi 24.000 unidades. Prevemos que la Vivienda de Interés Social (VIS) se recupere, en tanto el año pasado pesaba el 12 %, y este año pesaría entre 26 % y 30 %” (ver ¿Qué sigue?).
El cómo y dónde
¿Qué lugar tendrían los proyectos sostenibles en el crecimiento que espera Camacol para este año? Para Lucas Gómez Cuartas, gerente de Trazos Urbanos, desarrolladora inmobiliaria, se podría observar una expansión interesante en la medida que “las entidades financieras están ofreciendo incentivos tributarios para promover este tipo de construcciones”.
Y ejemplifica que “hay propuestas como fachadas verdes que ayudan a bajar la carga calórica de las unidades; nosotros acabamos de terminar un edificio que se llama Antejardín en el que sembramos 3.000 plantas, que tienen un efecto que reduce las cargas de aire acondicionado”.
En este sentido, Santiago Cárdenas, gerente general de Equipos Gleason, empresa dedicada al alquiler de bienes para la construcción, menciona que “otra práctica que se ha acogido es, por ejemplo, que la madera utilizada en el sector ya no provenga de bosques naturales, sino cultivados, siendo este un material más procesado”.
En medio de este tema, la coyuntura climática en el Valle de Aburrá, encabezada por las alertas debido a la calidad del aire, hizo eco en la asamblea de Camacol.
En este escenario, Loaiza manifestó que por los lados de la construcción “el problema está en unas 20 empresas que no han hecho el cambio tecnológico necesario, y que son casi informales” y también “en unos 3.600 vehículos de una enorme contaminación para lo cual estamos comprometidos con un plan de chatarrización de volquetas, planchones y camiones, iniciando el piloto en esta industria”.
Además, habló sobre uno de los puntos del plan de choque para recuperar el estado del aire en Medellín, referente a la transformación a gas de ladrilleras e industrias.
“Hay unas ladrilleras que ya han hecho ese ejercicio y es rentable, están con suministro de EPM. Hemos hablado con la administración y EPM para que den líneas de crédito blandas, con lo que se demuestre que esta industria tiene un compromiso con el medio ambiente de la ciudad y se obtenga un ahorro para financiar y recuperar la inversión que se hace”.
Asunto prioritario
Más allá de ser un asunto de actualidad y de protección del medio ambiente, la sostenibilidad en la construcción está estipulada en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.
En concreto, se trata de los objetivos 9 y 11, que propone la promoción de empresas sostenibles y la inversión en investigación e innovación científicas así como ciudades y comunidades sostenibles pensando en que hoy 4.500 millones de personas – el 55 % de la población mundial– vive en ciudades y para 2050 la población urbana sería de 6.500 millones.
La clave, dijo Cárdenas es pensar que invertir en sostenibilidad es de largo plazo, y no de retorno inmediato