Se abre puerta para la clínica Saludcoop de la 80
En plena calamidad pública por el avance del covid-19, Medellín recuperaría 297 camas hospitalarias. Esto falta para que sea una realidad.
Luego de más de 530 días de cierre, la clínica Saludcoop de la 80 emerge como una alternativa para ampliar la capacidad instalada de la red hospitalaria del Valle de Aburrá.
Esta infraestructura, ubicada en la comuna 16 contiguo al parque biblioteca de Belén, dejó de operar en octubre de 2018 cuando la Seccional de Salud de Antioquia clausuró los servicios que allí prestaba Esimed, IPS que había arrendado esa sede y que fue objeto de múltiples sanciones debido al incumplimiento de normas de calidad en la prestación de servicios de salud y a las constantes quejas por parte de los pacientes.
EL COLOMBIANO recorrió los exteriores de la clínica la semana pasada y evidenció que, por fuera, la fachada presenta un leve deterioro producto del descuido y la falta de mantenimiento. Los parqueaderos se convirtieron en un campo improvisado de fútbol y la fachada que da a la 80 en un enorme lienzo blanco donde se inmortalizan grafitis y mensajes de amor. Por dentro la estructura luce vacía y al cuidado de personal de seguridad.
Una posible salida
Aunque la Alcaldía de Medellín, en medio de la contingencia que implica la llegada del coronavirus a la ciudad, no ha formalizado su intención de adquirir este espacio, la caja de compensación Comfama emerge como una posibilidad para que este espacio se habilite de nuevo y se ponga al servicio de la comunidad antioqueña.
Felipe Negret, agente liquidador de Saludcoop, le contó a EL COLOMBIANO que la EPS en liquidación recuperó la propiedad de la clínica a finales de 2019, luego de un pleito jurídico que tuvo con Esimed y hace parte de los activos que buscan vender para pagar a los acreedores.
“Nos han llamado los alcaldes de Villavicencio, Pamplona, Cali y Pereira por otras clínicas, pero de la Alcaldía de camas hospitalarias se podrían recuperar en la clínica Saludcoop de la 80
Medellín nadie nos ha llamado. Lo que sí es que se viene adelantando una negociación con Comfama, que tiene la suficiente acreditación en estos temas de salud. Las clínicas están para garantizar la vida a las personas y lo que queremos es ponerla al servicio de la comunidad y más ahora con lo que está pasando”, contó Negret.
De acuerdo con el funcionario, la clínica está avaluada en $92.000 millones, tiene capacidad para albergar 297 camas hospitalarias y 25 de ellas de Unidades de Cuidados Intensivos. Aún tiene equipos médicos de radiología, tomógrafos, monitores de signos vitales, mesas de cirugía, entre otros. Sin embargo producto de la contingencia se podría buscar un comodato que permita que el negocio se concrete rápido y que se pueda habilitar dicho espacio.
Gustavo Escobar, responsable de Salud de Comfama, confirmó que la intención de la empresa y de un grupo de empresarios paisas es asumir esa infraestructura y dotarla de manera muy rápida para que, en cuestión de cuatro semanas, comience a operar de manera gradual y entre a reforzar la atención en el área metropolitana.
“Hace días venimos evaluando la opción de la clínica de Saludcoop y en diálogo con Felipe Negret hemos planteado que necesitamos ese activo al servicio de la ciudad. Entendemos que en un proceso de liquidación buscan vender los activos, pero buscamos la alternativa que sea más rápida porque la venta se puede demorar y la ciudad no tiene tiempo para eso”, contó.
Escobar anunció, además, que la opción que se ha explorado es asumir una especie de arrendamiento para ponerla a
¿Y las autoridades?
Luis Gonzalo Morales, gerente del equipo técnico delegado por el gobernador de Antioquia para articular acciones encaminadas a controlar la pandemia, confirmó que ese espacio es uno de los candidatos para ampliar la red de cobertura y que entraría a reforzar la capacidad del Valle de Aburrá que a hoy dispone de 836 camas con las condiciones especiales para este tipo de atención del coronavirus: 396 de cuidados intermedios y 440 de cuidados intensivos.
Jenifer Andree Uribe, secretaria de Salud de Medellín, dijo la semana pasada que la administración tenía ese espacio en el radar y que evaluaban cómo se podría reestructurar: “Lo hemos revisado como un plan B en caso de que el brote se dispare y tengamos que utilizar más instalaciones”, declaró.
Germán Reyes, presidente de Asmedas Antioquia, contó que desde hace más de quince días le expresaron a la administración municipal que era una muy buena opción para ampliar la red hospitalaria pública, en especial los servicios que se concentran en la Unidad Intermedia de Belén. “Ahora adquiere mayor relevancia porque es una infraestructura construida y que tardaría poco en ser dotada de nuevo”, explicó