CÓMO CUIDAR SU CORAZÓN
Según Natalia Pardo Restrepo, médica cirujana, especialista en medicina mentecuerpo con énfasis en manejo del estrés del Benson Henry Institute de Harvard, estas son las claves para prevenir y controlar problemas cardiovasculares relacionados con el estrés:
Tener hábitos de vida saludables. Lograr un buen sueño, reparador, lo que permite que nuestro sistema se recupere y reajuste.
Contar con una alimentación balanceada, preferiblemente guiada por un profesional. Actividad física suficiente y acorde con las propias características y necesidades.
Mantener conexión social positiva y relaciones profundas y significativas.
Aumentar las actividades de recarga, que son aquellas que aumentan los estados de calma, paz, seguridad y satisfacción para compensar el desgaste que se tiene cotidianamente.
Cuestionar regularmente las cargas que se están soportando en la vida. Analizar cuáles son autoimpuestas, cuáles no son imprescindibles en el propio proyecto de bienestar y nos quitan tiempo, energía y capacidad. El estrés también se presenta cuando la carga supera la capacidad de resistencia y este margen disminuye con los años.
Adaptarse a la realidad que se tiene, que es diferente a entrar en procesos mal adaptativos (donde se vive a través de la resistencia y la resignación). Adaptarse es aceptar.
Realizar actividades de relajación. Los efectos benéficos de la respiración
( mindfulness), la meditación, el yoga, el
taichi o el qigong. Está científicamente probado que estas prácticas activan el sistema parasimpático, que apaga los centros de alerta cerebral, los centros amigdalinos, que son los que nos mantienen en constante angustia, acelere, alerta, miedo, con una mente rumiante y viendo un futuro oscuro, hostil o cargado de incertidumbre. Por otro lado, estas técnicas de relajación encienden la corteza prefrontal (el sistema de navegación) permitiendo interpretar la vida de una forma distinta, una que nos genere bienestar.