Enero marcó retroceso en el mercado laboral
En enero la tasa de desocupación se ubicó en 17,3 %, la segunda más alta para comienzos de año desde 2002.
La tasa de desempleo para ese mes fue de 17,3 % y estuvo por encima de la del mismo período de 2020 (13 %) y la de diciembre (13,4 %), según el Dane. En total, son 4,16 millones de personas desocupadas en el arranque de año, y sectores como restaurantes y bares vieron una afectación en la mano de obra por los cierres para atender la segunda ola de covid-19. Le explicamos.
Las cifras del mercado laboral en Colombia observaron una dinámica negativa en el arranque de año. Según informó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) en enero la tasa de desocupación terminó en 17,3 %, lo cual estuvo por encima del dato del mismo mes del 2020, 13 %, e incluso del de diciembre, que registró un 13,4 %.
Se trata de la tasa de desempleo más alta para enero, desde 2002, cuando se observó un 17,9 %. Además, traduciendo este dato al impacto generado en la población, se trata de 4,16 millones de personas sin trabajo, es decir, 951.000 más de las que se contaban un año atrás.
En tanto, en la ocupación se observaron 19,9 millones de ciudadanos, lo cual refleja que 1,57 millones perdieron esta condición en el último año, teniendo en cuenta que para comienzo de 2020 había 21,5 millones de personas en este segmento.
Lo que explicó el director del Dane, Juan Daniel Oviedo, es que esa contracción de 1,57 millones se explica principalmente por una reducción de 404.000 plazas laborales en la industria manufacturera y de 387.000 en las actividades artísticas, de entretenimiento, recreación, entre otras relacionadas con servicios.
“Vemos una influencia muy importante (en la caída en cuestión) de las actividades de confección de prendas de vestir y fabricación de calzado y de muebles (...) también hay un aporte relevante del empleo doméstico y actividades recreativas y de esparcimiento”, mencionó Oviedo.
Efecto de los cierres
Pero los números también hablan de un impacto negativo de los cierres que se vivieron en diferentes zonas de Colombia durante enero, como medida para enfrentar la segunda ola de covid-19. Por ejemplo, en restaurantes y cafeterías la ocupación cayó 9,4 %; en el segmento de expendio de bebidas alcohólicas dentro de establecimientos se contrajo 66,4 % y en las actividades de catering para eventos 77,4 %. En concepto de Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria, aunque los cierres de la actividad productiva fueron necesarios, ralentizaron la recuperación de la economía colombiana.
“Esperábamos un deterioro un poco mayor de las cifras de desempleo, dado que los cierres aparentemente eran más fuertes. Esto nos dice que cuando se quitan estas restricciones al comercio y a la movilidad de las personas, seguramente en febrero va a haber una recuperación interesante de las cifras de empleo”, añadió Olarte. De su lado, Jaime Alberto Cabal, presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) se mostró preocupado por el balance de enero y consideró inminente impulsar una gran concertación para revisar las políticas de empleo en el país y pensar en la contratación y el salario integral por horas, vía reforma.
De esta manera el mercado laboral inicia un nuevo año con varios elementos de análisis como el hecho de que por cada dos hombres que salieron de la ocupación, hicieron lo propio tres mujeres, de acuerdo con Oviedo, del Dane (ver Paréntesis)