Finalizó retención cocalera en Tibú
La comunidad exigió la presencia del Gobierno.
mar medidas. Existen muchas cosas que debemos plantearnos. Tenemos muchos casos de testigos asesinados, y es muy complicado seguir sosteniendo causas si estas personas siguen manteniendo impunes contactos para amedrentar y, en el peor de los casos, matar” ■
Gracias a una mediación de la Defensoría y la Personería Municipal, terminó la retención ilegal en la que una comunidad cocalera mantenía a 140 soldados en el municipio de Tibú, Norte de Santander.
La crítica situación, que duró seis días, comenzó el pasado fin de semana cuando tres pelotones de la Segunda División del Ejército llegaron a unos predios de la vereda Caño Indio, con la misión de erradicar manualmente unos cultivos de coca.
Según el general Ómar Sepúlveda, comandante de dicha unidad, cerca de 300 campesinos rodearon a los uniformados, haciéndolos retroceder con palos y piedras. Los empujaron de regreso hasta una base militar cercana y allí les impidieron la movilidad.
“Les cortaron los suministros de luz y agua”, dijo, añadiendo que los implicados cometieron cuatro delitos: “Asonada, secuestro, perturbación de actos oficiales y violencia contra servidor público”.
Mientras duró la confrontación, los campesinos denunciaron el abandono gubernamental en sus territorios y el incumplimiento de los programas de sustitución de cultivos ilegales.
El Catatumbo, la región en la cual está ubicado Tibú, es la segunda con más sembradíos de coca en Colombia, con 40.116 hectáreas, según el último monitoreo de la ONU. La zona es disputada por el ELN, las disidencias de las Farc y otros grupos armados ■