Estalla lío por embajadores que no son de carrera
Los cambios prometidos por el presidente Gustavo Petro para la Cancillería no se han materializado del todo y, por lo mismo, se le acaba de abrir un nuevo frente de polémica en el interior de uno de sus ministerios.
Así lo manifestó la Unión de Funcionarios de Carrera Diplomática y Consular de Colombia, sindicato que aseguró que han sido pocos los funcionarios de carrera que, hasta ahora, tienen representación diplomática.
“Desde el 7 de agosto de 2022, hasta la fecha, han sido muy pocos los nombramientos de embajadores de carrera diplomática y consular en las altas representaciones bilaterales, multilaterales y consulados. En cambio, han sido numerosos y muy publicitados los nombramientos de personas ajenas a la carrera diplomática y consular, algunas de ellas carentes de suficiente soporte académico, idiomas o experiencia relacionada con la
función diplomática y consular”, aseguró el sindicato.
De acuerdo con información oficial, solo se han nombrado dos embajadores que vienen de la carrera diplomática: Victoria González Ariza, en Guatemala, y Carlos Andrés Hurtado, en Egipto. Otro, pero en el Palacio de San Carlos, es Francisco Coy, designado vicecanciller.
Durante su campaña presidencial, el entonces candidato Petro prometió que a las embajadas y consulados llegarían, en su mayoría, personas asociadas a la carrera diplomática. Insistió, además, en que el Ministerio de Relaciones Exteriores dejaría de ser un fortín para la política.
“La prioridad de todo el servicio diplomático que se nombre, la mayoría de carrera diplomática ojalá, será antes que nada garantizar los derechos fundamentales de los colombianos y colombianas en los países que hayan decidido alojarse, esa es la prioridad de cualquier embajador”, había manifestado Petro.
Pero el sindicato insistió que, pese a que el gobierno tiene puestos por ofertar a sus diplomáticos de carrera en Bogotá y en el exterior, todavía hay 60 embajadores de carrera que están nombrados en rangos inferiores a su categoría y más de 45 funcionarios que no han podido ocupar los rangos que les corresponden.
“Exigimos acciones concretas en favor del mérito y la especialidad. Además, pedimos un diálogo pronto y abierto con el Canciller sobre estos asuntos”, pidió el sindicato. El nom
bramiento de militares retirados en embajadas y consulares, dijo el sindicato, es una práctica que regresó con el nuevo gobierno y que, según explicaron, no es bien visto a los ojos de la comunidad internacional.
Entre los políticos tradicionales que llegaron a las emba
jadas están Armando Benedetti, en Venezuela; León Fredy Muño, en Nicaragua; y, entre otros, Camilo Romero, en Argentina. Todo pese a que el 18 de agosto pasado el canciller Álvaro Leyva les dijo a los funcionarios que sí se respetaría la carrera diplomática