BETA SAN MIGUEL, UNA FAMILIA QUE CRECIÓ
Beta San Miguel empezó en 1986 como una pequeña empresa de producción de azúcar en México, propiedad de una familia, y hoy es la industria del sector más grande del país, dueña de 11 ingenios que producen más de 1,1 millones de toneladas al año, y administrarlos a todos no era fácil. BSM intentó en tres oportunidades digitalizar sus procesos pero se encontró con muchas barreras: la primera se daba desde la concepción corporativa en la que la familia dueña sentía que perdía el control de su información y que existían riesgo de seguridad informática; la segunda tenía que ver con la dificultad de implementación en su planta de personal, que era bastante mayor: “Las personas mayores sienten con frecuencia que hay una sola manera de hacer las cosas bien, y es como siempre lo han hecho”, contó Raúl Uribe, director de TI de BSM; y la tercera es lo complejas que pueden ser algunas plataformas, por ejemplo, no es normal que un contador tenga que saber de programación de software si su tarea es llevar la contabilidad de la compañía. Pero siempre llega un punto en el que si la empresa quiere crecer más solo puede hacerlo a través de la tecnología, por eso decidieron intentarlo de nuevo y ahora sí que encontraron resultados, tal vez porque dieron con la solución correcta o porque con el tiempo todas las tecnologías van mejorando: “Pasamos, por ejemplo, de hacer cierres contables en 20 días a terminarlos en máximo 5, ¿sabes todo lo que puede hacer una empresa con información tan rápida? Ahora podemos entender dónde estamos gastando más de lo que podemos en solo 5 días, dónde hay que hacer ajustes”, explicó.