Una responsabilidad compartida
Cuando hablamos acerca de la tecnología, nos referimos a los servidores, aplicaciones, redes, usuarios, entre otros, que interactúan como un ecosistema vivo. Estos ambientes tecnológicos se protegen mediante las arquitecturas que durante más de veinte años Fortinet ha suministrado al mercado para garantizar la ciberseguridad, sea en un hosting, un centro de datos, un sitio remoto o la nube. Hace cerca de una década comenzó la exploración y la comprensión de la nube pública que, en los últimos cinco años, ha tenido mayor relevancia al permitir contar con una manera mucho más eficiente de consumir y acceder a la tecnología.
Consumir recursos tecnológicos solo cuando se necesitan, bajo la modalidad de servicios en que se genera un costo relacionado a la demanda, permite a los equipos de tecnología ser más eficientes en las estrategias entregando recursos según se requiere, lo que ahorra dinero y permite agilidad en la operación.
El trabajo conjunto entre Fortinet, AWS y los clientes genera un Modelo de Responsabilidad Compartida, que se convierte en un marco contractual que divide y dirime las responsabilidades entre la nube (AWS) y el cliente ante una eventual brecha de ciberseguridad.
Este modelo nos invita a trabajar de la mano de las organizaciones en la construcción de esa arquitectura de ciberseguridad en la nube para garantizar la protección de la información, de las aplicaciones y los sistemas que en ella sean alojados.
Además, este modelo permite a las organizaciones visualizar que la jornada de la nube es una de migración y de aseguramiento. En el medio suele usarse una frase: la nube habilita la transformación de los clientes. Y la ciberseguridad habilita a la nube.
Las áreas de TI deben tener presente el Modelo de Responsabilidad Compartida para ver la jornada de nube como algo que no puede separarse de una de seguridad e identificar con claridad cuáles son las responsabilidades que cada participante de este proceso tiene facilitando la toma de decisiones y asignando tareas operativas a los responsables, además de aumentar sus niveles de ciberseguridad.
Hoy, cuando los ciberdelincuentes están al acecho, el trabajo en equipo y la suma de esfuerzos, fortalece el sentido de prevención para disminuir riesgos. El Modelo de Responsabilidad Compartida bien manejado y entendido por las partes involucradas, en donde cada una entiende su participación e importancia en los procesos de aseguramiento de la información, impulsa esa gestión y brinda facilidades para que las organizaciones mantengan protegidos sus datos.
Ante esto, es indispensable que la nube tenga una estrategia de ciberseguridad y Fortinet apoya a las empresas para que la aceleración digital sea más cibersegura, además de evitar que la información y datos del negocio caigan en manos de los ciberdelincuentes.