Yolanda González: por primera vez en 50 años, una mujer dirige el IDEAM
“Una niña campesina decidió irse a Bogotá para estudiar. Su padre era agricultor y su madre ama de casa, labores propias del campo, pero ella siempre soñó con el estudio, era parte de su esencia. Siempre vio a sus siete hermanos estudiando y ese fue su anhelo: analizar y conocer más”, así recuerda Yolanda González Hernández sus años de infancia en Chiscas, un municipio de Boyacá.
En Bogotá finalizó el bachillerato y se inscribió a la Universidad Distrital José Francisco de Caldas para ser ingeniera forestal, carrera que eligió porque su “interés estaba asociado al campo, al conocimiento de las ciencias naturales y por mis propias raíces”, dice. Mientras acababa sus estudios como ingeniera, se fue a trabajar al Cauca con los indígenas paeces en sistemas agroforestales. Luego empezó a tener un interés particular en la vigilancia y el monitoreo de los recursos naturales, pero con énfasis en el tema forestal y se centró en el estudio de las zonas de humedales en el Caribe. “Empecé a trabajar con la recién creada Corporación Autónoma de La Mojana, Sucre, y estando allá me enteré de una convocatoria en el IDEAM. Necesitaban ingenieros forestales”, cuenta Yolanda. Yolanda se presentó y ganó un puesto en el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), entidad que juega un rol trascendental en temas como gestión de bosques, alertas de deforestación y cambio climático. En 1998, como subdirectora de ecosistemas, creó el sistema estadístico forestal y se encargó de liderar el desarrollo de un modelo de alertas de incendios forestales.
En 2018, se convirtió en la primera mujer en ser la directora del IDEAM. “Es un privilegio ser la primera en romper este récord de 50 años. Es algo extraordinario, porque como mujer estoy dirigiendo una institución que es la máxima entidad que emite información científica asociada a monitoreo del aire, del agua, del suelo, del bosque, de los ecosistemas y de la interacción con la sociedad”, cuenta. Además es la primera mujer en ser la presidenta de la AR3, Suramérica, y convertirse en la vocera de la región ante la Organización Meteorológica Mundial. Yolanda aprovecha su cargo para impulsar el programa "Mamá, quiero ser científica" y motivar a las niñas para que desde jóvenes contribuyan a reducir esa brecha en el campo científico y sean más mujeres las que lideren la ciencia en el país.