“A Junior sí se le mete plata, y mucha”
El técnico colombo-uruguayo Julio Avelino Comesaña fue el invitado especial del espacio virtual En La Jugada de www.elheraldo.co Analizó el momento que vive el cuadro Tiburón y lo que desea hacia futuro.
Julio Comesaña visitó ayer EL HERALDO y habló de la actualidad rojiblanca. Hoy se mide al Bucaramanga, en el ‘Metro’, a partir de las 8 p.m.
El tiempo y las experiencias vividas le han enseñado a Julio Avelino Comesaña que ya no puede ponerse en ese plan de coger rabietas y cazar peleas por cualquier motivo. A pesar de la incómoda situación en la que llegó a asumir su séptimo ciclo como entrenador de Junior, un equipo que aún no levanta cabeza, no luce estresado o intranquilo porque los resultados no se le están dando.
Ayer, en su visita a EL HERALDO, en donde fue el invitado especial del espacio web En la Jugada de elheraldo.co, el entrenador colombo-uruguayo estuvo analítico y abierto a las críticas. Habló y explicó sobre los motivos de sus decisiones en los partidos.
Comesaña dice que basa su trabajo en la motivación y en encontrar las virtudes de cada uno de sus jugadores para que estos recuperen la confianza y salgan a la cancha con la mentalidad ganadora y de enderezar el camino. “Hay muchas situaciones que son más de fondo, mas no de forma. Lo que más afectó a este grupo desde que yo llegué era lo que se decía, esta es una lucha brava. Lo que más cuesta es encontrar los estímulos internos”, sostuvo el orientador.
Comesaña afirma que con el paso de los partidos se ha dado cuenta de esas capacidades que quiere rescatar en sus pupilos. Cree que se ha evolucionado y que el equipo poco a poco se ha ido soltado, pero que aún le cuesta en ciertos aspectos. Quiere un Junior más audaz y que sus jugadores estén concentrados, que no bajen los brazos hasta que el árbitro no pite y que no se cometan más ingenuidades.
“Más allá de los resultados, a mí lo que me preocupa es cómo va el equipo. Creo que poco a poco vamos encontrando una idea. Estamos recuperando a Jarlan, ya se ve mejor. Ovelar es un delantero que cualquier equipo quisiera tener. Creo que tengo tres volantes mixtos. Toloza pasó del odio al amor, hoy me piden que no se vaya del equipo. Yo sé que desde que tomé al equipo hasta el final tengo que responder”, agregó.
Comesaña cree entender lo que quieren los hinchas del Junior y comparte ese estilo de juego. Sueña con un Junior que emocione y enamore a la gente. Un equipo que tenga un fútbol vistoso y que consiga grandes cosas.
“Quiero un Junior como el del 91 o del 93. Un Junior que emocione y que le guste lo que la gente quiere en Barranquilla. Cada vez que me llaman del Junior es una decisión emotiva más que razonada, nunca lo pienso dos veces”, sostiene.
Contrario a lo que mucha gente piensa en Barranquilla, Comesaña cree que la familia dueña de la institución sí le invierte al equipo y que siempre lo quiere ver en puestos de privilegio, con un prestigio en Colombia.
“Esta familia (Char) sí le mete plata, y mucha, al equipo. Es una familia ganadora en muchos aspectos de la vida”, expresa con firmeza.
Ve el futuro con optimismo y no duda que los directivos están haciendo todo lo posible para que las cosas mejoren y se vuelva a tener un equipo de perrenque y que este figurando en los primeros puestos. Pero también deja claro que hoy en día no es fácil contratar a un jugador, porque estos a muy temprana edad son adquiridos por clubes de Europa. “Yo pienso que la intención del club es mejorar toda esta situación y la prioridad es el plantel. Los buenos jugadores no quieren venir a Colombia. Un jugador que comienza a mostrar cositas buenas enseguida le ponen un precio alto y les interesa ir más a Europa. Los europeos están regados en todos partidos ha dirigido Julio Comesaña en su séptimo ciclo como entrenador de Junior. Siete de estos juegos han sido por Liga y dos por Copa Águila.
lados viendo jugadores y se los llevan jóvenes”, apuntó.
Julio Avelino también elogió el proceso que viene haciendo Arturo Reyes con el Barranquilla FC, equipo que elogió por su forma de jugar y del que destacó a varios jugadores. No descartó que en un futuro pueda contar con varios de estos muchachos en el equipo grande. Además cree que el futuro y el éxito de los buenos equipos está en sus divisiones menores.
“Arturo Reyes me parece un hombre sensato y aterrizado, no vino a venderme humo y su opinión es muy importante para mí. El Barranquilla tiene un 9 que juega bien (Herrera). Cabecea bien. Está Luis Díaz, el volante Padilla es ordenado. Hablar de ellos, para mí, es algo atrevido. Hay que invertir en la generación y en la camada de jugadores, la cantera”, analiza.
Julio Comesaña terminó el diálogo en medio de risas, relajado y con la frente en alto para seguir afrontando las cuatro fechas que le restan al Junior. La temprana eliminación la ve como una lección hacía el futuro y para darse cuenta en que aspectos debe fortalecer al equipo de cara el segundo semestre. No garantizó que se va a quedar, pero si los directivos deciden darle el respaldo, buscará las herramientas para que el equipo camine derecho. “El equipo es una fiel imagen de la institución”.
“La llegada mía al Junior genera confianza”.
“Estar en el Junior es una posibilidad que valoro y no desprecio”.
“Toloza pasó del odio al amor, ahora me piden que no se vaya”.
“Nosotros no somos ni el Real Madrid, ni el Barcelona”.
“Los Junior que yo he tenido han batido récords, ganaron en Bogotá y Medellín, después de años de no hacerlo”.
“Evalúo la condición técnica de los jugadores, su compresión de juego, velocidad y ejecución. Pero fundamentalmente el entender el juego en la toma de decisiones. Un jugador con carácter”.
“Hoy, ‘Pecoso’ Correa, Germán Gutiérrez y David Murillo están en un rendimiento superior al que les conocí. Hoy son los mejores que tenemos en la posición, por eso juegan”.
“Lo de Rangel es una decisión técnica. Para mí él debe ser el mejor definidor en el área del equipo”.
“Qué alegría me da ver a Michael Ortega como está jugando, hoy debe ser el mejor enganche del país”.
“Aponzá no está porque está jugando Toloza en esa zona izquierda y no le he encontrado la posición y el rendimiento. Aponzá es importante en el uno contra uno”.
“Me he equivocado, he peleado y de esa manera no he logrado nada, al contrario me he perjudicado”.
“Yo no saqué mal a Asprilla del camerino. En la época en la que peleábamos por evitar descenso, él entró al vestuario, pasó y ni me saludó. Yo estaba hablando en el entretiempo y él empezó a hablar con Giovanni y eso me pareció imprudente. Le dije que nos dejara solos. No tengo nada contra ‘el Tino”.