Gobierno corporativo, el reto de las empresas para mantenerse en el tiempo
Empresarios se dieron cita en EL HERALDO para analizar los retos que deben afrontar las organizaciones con la integración de las nuevas generaciones.
Después de una década, ante los deficientes resultados de diversas empresas en el mundo, expertos evaluaron sus efectos económicos y administrativos, llegando a la conclusión de la inminente necesidad de fortalecer el gobierno corporativo.
Colombia igualmente se sumó a estos esfuerzos por elevar los estándares de gobierno corporativo y promover ejercicios que fortalecieran este principio para sociedades cerradas, ya que las cifras revelan que la economía colombiana está compuesta por estas sociedades.
De acuerdo con las cifras de la Superintendencia de Sociedades, de las 19.109 empresas que enviaron reportes financieros a diciembre de 2005, el 70% son sociedad de familia.
En este sentido, EL HERALDO y la Cámara de Comercio se unieron para realizar la más reciente edición de Charlas Empresariales EH para conversar con empresarios que se han adentrado con éxito en este mundo.
En esta oportunidad estuvieron presentes Ramiro Avendaño, presidente de EL HERALDO; María José Vengoechea, presidenta ejecutiva de la Cámara de Comercio de Barranquilla (CCB); Reinaldo Niebles, subdirector de Desarrollo Estratégico de la CCB; Rubi Bolívar, gerente administrativa de la Clínica Los Almendros; Carlos Ariza, gerente general de la Clínica Los Almendros; Alexandra Hernández, gerente general de Central de Soldaduras; Pedro Palacio, gerente general de Palacio Oficina de Construcciones S.A.; Yuri Vasileff, gerente División Minería e Industria de Grupo Colba y Pedro Gutiérrez, gerente de Ingeniería de Proyectos.
En palabras de María José Vengoechea, desde la CCB se han venido planteando y desarrollando estrategias para responder a las necesidades de las organizaciones en este tema, que resulta preocupante cuando se observa que el 70% de las empresas familiares no llegan a la segunda generación y, más aún, si se tiene en cuenta que 90% del tejido empresarial en el Atlántico es de compañías familiares.
“Haciendo este análisis nos damos cuenta que el tema es bastante alarmante y que por eso desde la CCB estamos analizando toda la estrategia para poder apostarle al tejido empresarial”, agregó Vengoechea.
Según los últimos estudios de la Superintendencia de Sociedades, que expone las principales causas del por qué fracasan las organizaciones familiares, se advierte que 32,80% quiebran por falta de transparencia, 37% por el impacto de los problemas familiares, 44% por recursos humanos sin competencias requeridas y 51% por malos manejos administrativos.
Esta misma encuesta de la Supersociedades reveló que el 25% de los empresarios busca asesoría externa en administración y junta directiva para anticiparse a enfrentar estas crisis, y es ahí, donde la Cámara viene impulsando buenas prácticas para la perdurabilidad empre- sarial.
Estas prácticas, conocidas en el mundo empresarial como gobierno corporativo, son básicamente un conjunto de herramientas que han demostrado en diversas empresas, sean grandes, medianas o pequeñas, que se logra una mejor y adecuada administración empresarial, lo que conlleva a la preservación de la compañía, protegiendo los intereses de la sociedad. Igualmente, la correcta ejecución de dichos mecanismos posibilita el acceso a fuentes de financiamiento y capital más sofisticados.
RETO CON COMPAÑÍAS LOCALES. Reinaldo Niebles, subdirector de Desarrollo Estratégico de la CCB, manifestó que por las razones que sean, los empresarios de la ciudad que han participado en estos programas para prepararse ante los desafíos supuestos por sus organizaciones, han estado dispuestos a asumir prácticas de perdurabilidad.
“Hablar de gobierno corporativo es hablar del futuro de las organizaciones y su aporte es valioso para ver estos retos como oportunidades para el crecimiento de las compañías y que se piensen y se configuren de forma distinta”, enfatizó Niebles.
Alexandra Hernández, gerente general de Central de Soldaduras, manifestó, como experta en su organización, que lo importante para asumir estos retos es querer y tener la intensión de cambiar.
“Este es un proceso que se debe hacer en las organizaciones porque si no hay una gran organización en la cabeza de las mismas, estas se acaban, por eso debemos tener disposición para llegar a ese punto, porque hay quienes se cansan en el camino y esto es algo que se debe asumir con responsabilidad”, acotó Hernández.
Pedro Palacio, gerente general de Palacio Oficina de Construcciones S.A., se refirió a las acciones tomadas en su organización para alcanzar este nuevo paso que permitirá la transformación de la misma, como “un cambio realmente grande”, teniendo en cuenta que no es fácil llevar a cabo el proceso.
Carlos Ariza, gerente general de la Clínica Los Almendros, por su parte, consideró que las empresas nacen con un sueño y para que no mueran tampoco deben morir los sueños, porque a través de la experiencia se debe consolidar un grupo de trabajo que ayude al cumplimiento y materialización de los mismos.
Ariza resaltó además que detrás de sus fundadores, dentro de las compañías, vienen más generaciones que tienen pensamientos diferentes y el objetivo es que esas empresas, que evidentemente nacieron con un sentido moral y humano, nunca se pierdan en el tiempo, y que la primera generación dé cabida a la segunda, y así sucesivamente.
“Con este trabajo que se está haciendo se da la oportunidad a la segunda generación para que comience a afianzar sus conocimientos en la parte académica y a gerenciar las empresas, y si se tienen en cuenta esos aspectos se permitirá continuar y tener nuevos y mejores escenarios”, agregó el gerente general de la Clínica Los Almendros.
Yury Vasileff Soto, del Grupo Colba, y quien ha venido participando de los procesos emprendidos por la CCB ante los retos supuestos en su organización que ya se acerca a la tercera generación, destacó que estos mecanismos son de vital importancia para construir las bases sólidas dentro de las compañías.
Señaló que para efectos de que los procesos puedan ser exitosos y que los nuevos profesionales de la familia se postulen a ocupar cargos dentro de la empresa, “nosotros hemos tenido todo un acompañamiento para definir los lineamientos y reglas que permitirán los derechos y deberes para asumir”.
Pedro Gutiérrez, gerente de Ingeniería de Proyectos, manifestó que parte de la evolución de esta empresa fue pasar de una organización de socios a una empresa familiar y empezar a pensar un poco más en el futuro y en el día a día como parte de su crecimiento.
“Si solo nos preocupamos por la parte comercial de la empresa se cometen muchos errores porque eso es parte del crecimiento de la misma y emprender el camino del que a veces no se es capaz”, añadió.
Rubi Bolívar, gerente administrativa de la Clínica Los Almendros, fue enfática al concluir que “hay que prepararse y adquirir conocimiento, porque esa es la mayor fortaleza y base para dirigir las organizaciones y que estas sigan adelante, porque el recurso humano es uno de los factores más importantes de cualquier compañía”.