¡Hala Madrid! ¡Visca Barça!... ¿Y Junior tu papá?
En estos días en que los partidos de Junior parecen capítulos de The Walking Dead (Los Muertos Vivientes), se hizo inevitable centrar mucho más la atención en las grandes ligas de Europa y dejar de lado un torneo local que todavía tiene canchas vergonzosas como las de Pasto, Floridablanca y Tuluá, entre otras. Algunas con morros para ciclomontañismo y otras con tanto barro como para camper cross.
¿Será que los directivos del fútbol colombiano y los dueños de los derechos de la televisión notan que esos detallitos suman argumentos para que los aficionados prefieran los campeonatos internacionales en vez del criollo?
Barcelona vs. Eibar, con Messi, Neymar y Suárez plasmando buen fútbol en el gramado del Camp Nou siempre será mejor que Envigado-Nacional con un Polideportivo Sur con parqueadero y canchas de microfútbol de fondo en vez de tribunas.
Las diferencias entre lo que le muestran a uno allá y acá son abismales en diversos aspectos. Por eso, los directivos de Junior deberían, por fin, empezar a estabilizar al club en todo sentido y no darse el lujo de tolerar otras campañas como la de este semestre. Evolucionar. Las pérdidas económicas son enormes, pero aún más las intangibles. Es incalculable la cantidad de seguidores rojiblancos que se decepcionan y dejan de germinar en esta época de globalización en medio de un momento tan pésimo.
Una gran hinchada no se sostiene solamente por la tradición, sentimiento y sentido de pertenencia por la divisa de la tierra. Hay que darle constantemente razones deportivas para mantener el orgullo y satisfacción de ser juniorista. De lo contrario, será cada vez mayor la cantidad de camisetas azulgranas y blancas que veremos en la calle. Y los barranquilleros que gritan ‘Hala Madrid’ o ‘Visca Barça’ en vez de ‘Junior tu papá’.