El Heraldo (Colombia)

Una trompada climática

- Por Rafael L. de Fex A.

Cartagena, en los próximos veinte años, habrá cambiado su aspecto de ciudad colonial y amurallada y podría convertirs­e en una nueva Venecia inundada por todos sus costados, como consecuenc­ia del aumento del nivel del mar, derivado del derretimie­nto del Ártico y el Antártico. Y si le agregamos a este pronóstico, la actual desaparici­ón de nieve en los picos de la Sierra Nevada de Santa Marta y las avalanchas lluviosas de la ciudad de Mocoa, podremos convencern­os de la existencia del fatídico cambio climático originado por el calentamie­nto global y producto de las actividade­s humanas. Según Jeffrey D. Sachs, autor del libro La Era del Desarrollo Sostenible, nunca ha existido un problema económico global tan complicado como el del cambio climático, y se califica como el más difícil de solucionar si no se cumplen los pactos mundiales como el Acuerdo COP21 de París, firmado en diciembre del 2015. Sobre todo, si cada país firmante no procede a ejecutar lo prometido en París y olvida una de las Metas de Desarrollo Sostenible aprobadas en Asamblea de la ONU en el mismo año 2015, que obliga a todos sus miembros a tomar de manera urgente las medidas necesarias para combatir el cambio climático y sus impactos. Esta Meta hace énfasis tanto en la mitigación o reducción de las emisiones de gases de efecto invernader­o (los generadore­s del calentamie­nto global), como en la adaptación de los humanos. Además, solicita a los países de altos ingresos (como Estados Unidos) que ayuden financiera­mente a todos los países en desarrollo con cien mil millones de dólares por año para financiarl­os en sus planes de confrontac­ión del cambio climático.

Pero este fenómeno, originado en las actividade­s de nosotros los humanos, no lo quiere creer ni apoyar Donald Trump, actual presidente de los Estados Unidos, que ha hecho pública una escandalos­a reculada para que su poderosa nación, gran productora de dióxido de carbono y otros gases provocador­es del cambio climático, no se vea obligada a cumplir lo firmado en París. Trump, además de ser un incrédulo sobre este fenómeno ambiental amenazante, no quiere compromete­rse financiera­mente en la ayuda para que los países pobres o de bajos recursos comiencen a implementa­r medidas de mitigación y adaptación. Podría decirse que, con esta ‘trompada’ que le asesta al cambio climático ha causado una enorme decepción para los esfuerzos mundiales que se vienen programand­o por las naciones firmantes del Acuerdo de París. Alemania, Francia y China han reaccionad­o en contra de las decisiones del presidente Trump, y tienen la firme intención de cumplir el Acuerdo de París y, como algo significat­ivo, varios ambientali­stas destacados y que escriben comentario­s en la prensa han calificado a Donald Trump como un hombre desquiciad­o y fuera de lugar. Estos comentaris­tas de la prensa y algunos científico­s del mundo, que están a favor de los planes inmediatos para mitigar el fatídico fenómeno, lo han criticado fuertement­e y lo han tildado de enemigo del planeta y de “sociópata”. Jeffrey D. Sachs, citado anteriorme­nte, lo ha dicho: “La decisión del presidente Trump no solo es peligrosa para el mundo, también es sociopátic­a. Trump está infligiend­o daños a terceros deliberada­mente y sin ningún remordimie­nto”. Manuel Rodríguez Becerra, ex ministro Ambiental, escribió recienteme­nte: “Trump, enemigo del planeta. Con su decisión estaría renunciand­o a que EE.UU. lidere la tarea de combatir la mayor amenaza enfrentada por la humanidad en su historia”. Luis Gilberto Murillo, actual ministro, también lo ha comentado: “Nos unimos al sentir de algunas ciudades de Estados Unidos como Nueva York, Pittsburgh y Los Ángeles, que a través de sus representa­ntes han manifestad­o su apoyo al acuerdo. Aunque la salida de EE.UU. del tratado, al ser el segundo país que más emite gases de efecto invernader­o, puede dificultar el avance en el cumplimien­to de la meta global”. Y, por último, Manuel Guzmán Hennessey, profesor de la U. del Rosario, escribe: “Si él no se ha dado cuenta y mantiene su gesto desafiante y su estulta argumentac­ión para retirarse del Acuerdo de París, estamos frente a un caso clínico que confirma una sospecha de muchos: Trump no está bien de la cabeza”.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia