Siempre habrá una primera vez

Y henos aquí frente a Brasil otra vez. Jugar contra la selección brasilera trae consigo el qué hacer. Que hay que atacarlos, que hay que defenderse, que hay que ser equilibrados. Que hay que robarles el balón. Que hay que administrarlo. Que la tenencia es definitiva. Lo único cierto es que para vencer al Brasil hay que jugar impecable en defensa y ataque. Hay que ganarle los duelos individuales. Y hay que hacer goles, obvio. Colombia nunca le ha ganado a Brasil en el clasificatorio rumbo a los mundiales. La misma historia nos avasalla y nos pone en condición de peligro. Claro que la historia no juega sino que es una referencia estadística. Esta vez la razón me dice que el partido va a ser duro pero el corazón me dice que vamos a ganar.

Que no es fácil es cierto. Como visitante, este Brasil de Tite le ganó 3-0 a Ecuador, 2-0 a Venezuela, 2-0 a Perú y 4-1 a Uruguay haciendo 11 goles y recibiendo solo uno. Ha sido una aplanadora pero siempre habrá una primera vez. Para ganar y para perder.

Brasil ha tenido una ventaja sobre el resto. Tite encontró una alineación básica y, sobre ella, ha podido solucionar ausencias con jugadores del mismo nivel. Durante su mando ha utilizado a Allison como arquero. La zona de defensores ha sido fija con Alves, Miranda, Marquinhos y Marcelo. Lo volantes de oficio Casemiro y Paulinho. Los volantes generadores Renato Augusto y Willian y los puntas Gabriel Jesús y Neymar. Esta vez, Miranda no estará por lesión y su lugar lo tomará Thiago Silva. Tampoco estará Marcelo por suspensión. Su reemplazo, Filipe Luis.

La Colombia de Pékerman también tiene jugadores fijos. Hablo de Ospina, Arias, Zapata, Sánchez, Cuadrado, James y Falcao. A ellos se sumarán Murillo, Fabra, Aguilar, Teófilo, Chará y Cardona. Jugadores de buen nivel, sin duda.

Hoy ganará el que tenga más equilibrio. El que pegue primero y sostenga el marcador. Ambos pueden hacerlo. La diferencia es que Colombia tiene la necesidad. Brasil no…