El encuentro con un campeón del mundo
EL HERALDO siguió de cerca la presencia en Colombia de David Trezeguet, ganador del Mundial de Francia 1998 con el equipo galo.
EL HERALDO siguió de cerca la presencia en Colombia de David Trezeguet, ganador del Mundial de Francia 1998 con el equipo galo.
Un pelotón de periodistas, camarógrafos y fotógrafos le hace guardia a David Trezeguet en la sala de prensa del estadio El Campín. Son las 9 a.m. del miércoles 4 de abril. El franco-argentino, campeón en el Mundial de Francia 1998 con el seleccionado galo, ya acumula 22 horas y 37 minutos de haber aterrizado en Bogotá como figura central del ‘Tour del Trofeo de la Copa del Mundo’, organizado por Coca Cola.
Desde que el avión especialmente adaptado para transportar el invaluable icono del fútbol aterrizó en la capital colombiana, el martes a las 11:37 a.m., Trezeguet no hizo otra cosa que estar detrás de la figura de 6.142 kilogramos de oro puro, pronunciar discursos sobre la emoción que se siente al levantarlo en una cita mundialista y atender a periodistas que le preguntan una y otra vez sobre el trofeo y de “cómo ve a Colombia para Rusia-2018”.
El primer acto fue en el aeropuerto tras descender de la aeronave, en medio de un helado aguacero. Almorzó en un restaurante de la localidad de La Candelaria, en el Centro Histórico de Bogotá, en compañía de directivos de la multinacional de bebidas, y de inmediato se dirigió a la Casa de Nariño, donde protagonizó un evento con el presidente Juan Manuel Santos. Volvió a develar el preciado galardón (que solo pueden tocar los campeones mundiales como él y los jefes de estado), rememoró algo de la gloria que saboreó en Francia-1998 y reiteró que “Colombia puede hacer un buen papel” en territorio ruso.
En la noche del mismo martes, se repitió la escena durante un concurrido coctel en el Club El Nogal. Trezeguet ratificó sus palabras y dejó al descubierto la Copa. En todo el día, durante toda su rutina como embajador de la Fifa y una de las estrellas de la gira mundial del trofeo, se le vio con la mejor disposición, elegante, con fluidez verbal y sonriente ante el público.
El miércoles, vestido más informalmente, llegó a El Campín poco antes de las 9 a.m. Mientras en una gigantesca carpa los aficionados ingresaban para ver de cerca el trofeo y tomarse una foto de recuerdo, de otro lado, en la sala de prensa del escenario, David Trezeguet no paraba de dar entrevistas. Había una larga lista de medios que solo tenían tres minutos para interactuar con él.
Poco a poco entraban los soldados de la prensa para disparar sus interrogantes. Para agilizar y gozar de mayor tiempo con el exdelantero que brilló en el Mónaco, la Juventus y la selección francesa, un gru- po de seis comunicadores nos pusimos de acuerdo con la organización para entrar todos juntos y sumar los tres minutos de los que disponía cada uno.
Ya el reloj marcaba las 11:45 a.m. cuando nos correspondió el turno. Por piedad con Trezeguet ya habíamos cuadrado que estaba terminantemente prohibido preguntarle “cómo ve a Colombia para Rusia-2018”, algo que estaba respondiendo desde que pisó el país.
“Tranquilo que no te vamos a preguntar más de la Selección Colombia”, se le avisó jocosamente al entrar a la sala. Trezeguet sonrió, se sentó y comenzó a ponerle el pecho al siguiente bombardeo:
¿Qué tal su retiro?
P
R Estoy trabajando con Juventus hace tres años, ocupándome de su imagen y de la parte comercial. Tiene mucho crecimiento en cada continente. Estoy haciendo unas cosas con Fifa. Hago parte de ese cambio global de la Fifa. Creo mucho en el poder darle espacio a los exjugadores y leyendas que han hecho una historia importante en el fútbol, siempre con una cierta preparación.
¿A quién idolatra y P con quién le gustaría tomarse una foto?
Cuando jugaba, mi ídolo R personal era Gabriel Batistuta. Tuve la posibilidad de jugar contra él, ese fue un día muy emotivo para mí. Crecí con la imagen de Diego Armando Maradona. Y en la actualidad es verdad que Lionel Messi y Cristiano Ronaldo son los jugadores que me han marcado.
¿Tiene fotos con P todos ellos?
Tengo algunas fotos con P ellos, pero juntos sería mejor.
Si le tocara escoger P entre Messi y Cristiano, ¿a quién elegiría?
Por una cuestión mía, R de raíces, seguramente que Messi es el jugador más importante, más determinante, más sudamericano que Cristiano, que es el prototipo más europeo, pero sin desmerecer a ninguno de los dos porque son únicos y han marcado una historia en el fútbol mundial.
¿Cuál fue el momento P más triste y el más feliz en su carrera?
El descenso con la ‘Juve’. Teníamos la ambición de seguir creciendo y concretar el objetivo de ganar la Liga de Campeones, que para Juventus es difícil. El más feliz, seguramente, fue lograr la Copa del Mundo cuando tenía solo 20 años.
R¿Cómo fue el momento P del descenso?
Para nosotros fue un R momento muy negativo, contábamos con Ibrahimovic, con Emerson, Vieira, Cannavaro, Capello, después de pocos meses nos encontramos con una situación completamente diferente, con chicos de divisiones inferiores, con un puntaje de -17 puntos. Mantuvimos un orden y logramos el objetivo. Fue lo que me tocó vivir en Italia y en Argentina, con River. Llegué allá en una situación (de descenso) diferente porque el fútbol sudamericano vive de emociones y pasiones mucho más fuertes que las europeas.
¿Cómo le gustaría P que lo recordaran?
Una vez que el futbolista R deja su carrera profesional, comienza una nueva etapa completamente diferente. No es simple de gestionar porque se pasa de un trabajo que se ha hecho durante 20 años, en el que entrenas, juegas y viajas, a otra fase de la vida. A mí me ha tocado prepararme con mis estudios y volviendo a la ‘Juve’. El reconocimiento de la gente hacia mi persona es muy importante, adonde voy me reciben de manera abierta. Siempre respeté, tenía cierta humildad y cierto profesionalismo, eso es lo que la gente aprecia, por eso el recuerdo de la gente hacia mí, más allá del jugador, es la persona, eso es lo más importante para mí.
P ¿Qué sueño le falta por cumplir?
R A nivel deportivo he tenido la posibilidad de cumplir todos mis sueños. La Liga de Campeones es el único trofeo que me ha faltado a nivel personal. Lo compenso con el trofeo más importante que es la Copa del Mundo.
P ¿Un mensaje a los niños que se inician en el fútbol?
R La humildad y el acercamiento a los aspectos culturales, sociales y familiares es muy importante. Hay que ser ejemplares, los futbolistas somos modelos, personajes a seguir. P ¿Su peor día en el fútbol?
R Final de la Liga de Campeones contra el Milan (2002-2003). ¿Qué es lo malo de P ser futbolista?
R No tener tiempo para estar con la familia y los seres queridos. P ¿Cómo se pinta en 30 años?
R Viejo (risas). Espero que tenga ganas de seguir haciendo cosas. P ¿Maradona o Messi?
R (Respira profundo y eleva la mirada tratando de decidirse)… Eeeh… Maradona. con P ¿El el mejor que jugó? futbolista
R Difícil para mí. Tuve la suerte de jugar con tres ‘balones de oro’ que fueron Pavel Nedved, Fabio Cannavaro y Zinedine Zidane. P ¿El mejor amigo que le dejó el fútbol? R Mauro Germán Camoranesi.
P ¿El mejor técnico? R Marcello Lippi. P ¿El mejor gol?
R El que le anoté a Italia en la final de la Eurocopa 2000. P ¿Un estadio?
R El Monumental (de River). P ¿El defensa que más le pegó? R Fueron tantos (risas)... Paolo Maldini.
P ¿Un periodista? R Difícil pregunta...
“Los futbolistas debemos ser ejemplares, los niños nos ven”.