No dormir, un...
Entre cuatro u ocho horas es el horario promedio de sueño de un ser humano. “Es fundamental que los niños duerman con un horario regular, es decir, dormir y acostarse a la misma hora para que el sistema y su reloj interno de sueño pueda funcionar de mejor manera”, añadió el neurólogo Juan Camilo Gutiérrez.
DORMIR DEMASIADO. Muchas personas piensan que el único problema en el sueño es dormir mal pero, según Gutiérrez, hay diversos estudios que demuestran que las personas que duermen más de ocho horas también aumentan la posibilidad de enfermarse y de poseer alguna alteración. “Yo recomiendo que el periodo de sueño no pase de ocho horas porque puede aumentar el riesgo de enfermarse y de morbimortalidad (estadística sobre las muertes en una población)”.
Los profesionales recomiendan a los padres enseñarle a sus hijos un “hi- giene de sueño” adecuado, es decir, que cumplan horarios de sueño. Asimismo, los expertos recomiendan evitar que los niños realicen actividades que generen la alteración del sueño antes de ir a la cama como tomar bebidas estimulantes o alcohol, y erradicar en general malos hábitos como lo son comer en altas horas de la madrugada.
“La última comida debería ser tres horas antes de dormir para hacer una buena digestión y no tener trastornos del sueño”, expresó la pediatra Ortega.
Por otra parte, cuando se acerca la hora de dormir en los niños es importante que los padres los mentalicen apagando los aparatos electrónicos, las luces y cumpliendo con los hábitos nocturnos.
Gutiérrez expresó que estos deben entender que cuando un joven no puede “dormir bien” no siempre es por un capricho de su edad, sino que puede tener problemas de insomnio. En ese caso, “lo primero es analizar si el problema del paciente es frecuente y la severidad que tiene”.
Si los padres observan que el problema se está volviendo crónico, es indispensable consultar al especialista en sueño, quien intentará modificar los “malos hábitos” del menor y después buscará descartar cualquier compromiso neurológico debido las enfermedades que se asocian a este trastorno. En última instancia, los profesionales tomarán la decisión de medicar a los niños teniendo en cuenta su tratamiento.
“Los niños deben cumplir un horario de sueño”.
JUAN CAMILO GUTIÉRREZ
Neurólogo