La voz de Hawking viaja por un agujero negro
En el entierro de sus cenizas un mensaje del astrofísico fue enviado al espacio ➲ Su tumba quedó al lado de la de Newton y Darwin.
LONDRES. Un mensaje del astrofísico británico Stephen Hawking fue transmitido ayer hasta el agujero negro más cercano a la Tierra durante el entierro de sus cenizas, junto a la tumba de Isaac Newton, en la abadía de Westminster de Londres.
La composición con su famosa voz sintetizada y especialmente escrita para la ocasión fue transmitida al espacio desde una antena de la Estación de Cebreros, en el centro de España, por la Agencia Espacial Europea.
“Es un gesto hermoso y simbólico que crea un vínculo entre la presencia de nuestro padre en este planeta, su deseo de ir al espacio y la exploración del universo en su mente”, dijo su hija Lucy Hawking.
El mensaje de Hawking fue transmitido hacia “el agujero negro más cercano, 1A 0620-00, en un sistema binario con una estrella enana naranja bastante ordinaria”, dijo la hija de Hawking.
Ese sistema se encuentra a casi 3.500 años luz de la tierra, el tiempo que tardará en llegar el mensaje.
Hawking, que capturó la imaginación de millones de personas en todo el mundo, murió el 14 de marzo a los 76 años.
Impulsado al estrellato por su libro de 1988 Una breve historia del tiempo, que fue un éxito de ventas, el genio de Hawking conquistó admiradores mucho más allá del complicado mundo de la astrofísica. SU ÚLTIMA MORADA. Isaac Newton, el descubridor de la ley de la gravedad, fue enterrado en el gran templo londinense en 1727. Charles Darwin, el padre de la teoría de la evolución, fue sepultado detrás de Newton en 1882.
La última gran personalidad en ser enterrada en la abadía fue el actor Laurence Olivier, en 1989. Los últimos científicos cuyos restos ingresaron en el panteón fueron los físicos atómicos Ernest Rutherford, en 1937, y Joseph John Thomson, en 1940.
El premio Nobel de Física 2017, Kip Thorne, que trabajó con Hawking, el astronauta británico Tim Peake, el astrónomo Martin Rees, o el actor Benedict Cumberbatch, que interpretó al astrofísico en una película de tv, pronunciaron discursos en la ceremonia. Entre los asistentes estaban además el músico estadounidense Nile Rodgers y el líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn. Alrededor de 1.000 miembros del público de más de 100 países asistieron al servicio, tras concurrir a un sorteo en el que participaron 25.000.