Marimondas dicen adiós a ‘Paragüita’, su máximo impulsor
César Morales ‘Paragüita’, director de la comparsa de marimondas más grande del Carnaval, falleció ayer a sus 72 años.
A las 3:30 de la tarde, en Jardines de la Eternidad, los 900 integrantes de las Marimondas del Barrio Abajo despedirán al carnavalero que revivió el icónico disfraz de la fiesta barranquillera.
‘Paragüita’, el ‘rey’ de las Marimondas del Barrio Abajo, quería morirse un Miércoles de Ceniza. “¿Te imaginas que uno se muriera un Sábado de Carnaval? ¡Nombe, mija. Qué vaina barra! ”, le decía a su hija Leslie el eterno director de la comparsa homenajeada este año, ganadora de 32 Congos de Oro.
Por primera vez en un Carnaval, César Morales, conocido como ‘paragüita’, no pudo acompañar a sus marimondas en la Vía 40. Sus quebrantos de salud se intensificaron y no le permitieron disfrutar de las fiestas del dios Momo. Falleció en la madrugada de ayer a sus 72 años por problemas cardiacos.
“En mi sepelio no quiero caras tristes ni llanto”, le decía a sus seres queridos. “Que vayan todas mis marimondas y me despidan entre porros y fandangos”, cuentan con una mezcla de alegría y melancolía los que conocieron a fondo a ese hombre feliz.
La interminable y colorida comparsa que con su jolgorio, perrateo y mamadera de gallo alegra el Carnaval, las Marimondas del Barrio Abajo, era el mayor orgullo de este cancamán de las festividades que además de dirigir el grupo más grande de carnavaleros –con 950 miembros– dejó un legado inconmensurable para este Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, pues logró recuperar al ícono más representativo de la fiesta: la marimonda, un disfraz que estuvo a punto de desaparecer.
La emblemática figura de las carnestolenadas que se burla de manera repelente de la clase política y las autoridades es tan vieja como la fiesta. Pero “por su comportamiento vulgar e irrespetuoso se iba siempre a la guandoca”, expresó este raizal bajero en una ocasión.
Así las cosas, con el pasar de los años empezaron a extinguirse las marimondas hasta que en 1983, en medio de una parranda con vecinos y amigos, a ‘paragüita’ se le ocurrió volver a sacar el disfraz, esta vez con una coreografía, de manera ordenada y con trajes mejor elaborados, dándole a esta insignia carnavalera la importancia que merecía. En el 84 se estrenaron en el cumbiódromo con 60 marimondas ganándose el primero de sus 32 Congos de Oro.
“El Carnaval mantuvo con vida a mi papá. Para él los 365 días del año eran de bacanería esperando con ansias la llegada de sus cuatro días más felices. Era amante de la música y de la salsa brava, tanto que mi segundo nombre es Salsi (en honor a la salsa). En mi casa la Navidad no existía, le decía a mi mamá: ‘no armen el arbolito porque después no hay donde poner las telas de los disfraces’, en vida le dio todo a esta fiesta y a sus marimondas”, agregó Leslie, una de las líderes de la comparsa.
EJEMPLO DE DISCIPLINA.
Tomás Salcedo, miembro de la comparsa hace 12 años, recuerda un ensayo previo a los carnavales del 2008 en el que participaban más de 500 marimondas. En medio de la danza y la algarabía del grupo que se preparaba para las festividades, ‘Paragüita’ hizo detener la música. –Tomás, bota el chicle– le dijo en un tono amable, pero investido de la autoridad que le asistía para dirigir a sus multitudinarios bailarines.
“Cualquiera pensaría equivocadamente que una comparsa en la que reina el relajo y el mamadera de gallo es desordenada, pero no es así. Paragua era un líder innato, una institución, su palabra infundía respeto y a todos y cada uno de sus miembros nos inculcó valores que tendremos siempre”, expresó Hilda Pedraza, una de las marimondas más antiguas con 31 años en la comparsa, que con lagrimas despidió a quien por muchos años fue su mentor.
Su esposa, Patricia Gómez, con quien compartía su vida hace 26 años explica que ‘Paragüita’ falleció de un paro cardiaco ocasionado por una cardiopatía dilatada. “Tenía el corazón muy grande, hace un año luchaba con eso. El Carnaval del 2018 fue la única fiesta en la que no pudo participar. Para él fue muy duro no estar con sus marimondas. Yo tomé la batuta y dirigí la comparsa, fue difícil porque el tenía esa capacidad de que la gente le caminara con solo una palabra, pero llevaré la bandera de esta tradición como él quiso”.
Dardi Fernández, con tan solo un año en Las Marimondas del Barrio Abajo cuenta que en ese espacio encontró a una familia. “Él era especial, su carácter y su buena vibra serán inolvidables para mi”, dijo.
Por su parte, Adelina Llinás, marimonda hace más de 20 años, resalta de ‘Paragüita’ “su prodigiosa memoria”, pues “se sabía los nombres y apellidos de cada uno de los integrantes” de su gigantesca comparsa.
Su famoso apodo viene de un episodio ocurrido en el popular Barrio Abajo con ‘la loca Carmen’ un personaje que “se patoneaba las calles del barrio a quien se le había metido el arranque de que él era el marido y le había quitado a su hijo”. Conocidos recuerdan el pintoresco hecho en el que le pedía que le devolviera al pelao y él “mamándole gallo” le dijo que no se lo iba a dar. A lo que la loca furibunda lo levantó a paraguazos. El sobrenombre desencadenó varias muñequeras en el barrio, pero con el tiempo se transformó en un símbolo de orgullo para este barranquillero.
Carnaval S.A lamentó el fallecimiento de uno de sus personajes más queridos y recalcó el inmenso legado que le dejó a la fiesta y a la ciudad.
En la sala de velación de Jardines de la Eternidad sede norte una mascara de marimonda reposaba sobre el ataúd de ‘paragüita’. Largas filas de personas se acercaban a despedirlo , a darle las condolencias a sus familiares y a verlo lucir por última vez el disfraz de las Marimondas del Barrio Abajo.
Sus exequias se celebrarán hoy a las 3:30 de la tarde, el mismo día en el que habían planeado una fiesta en honor a su nuevo Congo de Oro y a los 35 años de existencia de la comparsa. La parranda de las marimondas no se canceló por la ausencia de su líder, pues así como él al salir del quirófano les dijo a sus familiares con sus últimas energías ¡Qué viva el Carnaval de Barranquilla! de la misma manera será despedido, entre los porros y fandangos que tanto le gustaban, María varilla, 20 de enero, Fiesta en corraleja, música de sus amores que sonará en sus honras fúnebres, mientras que sus cenizas serán guardadas hasta el próximo Sábado de Carnaval.
“Mi papá le dio toda su vida al Carnaval de Barranquilla”.
LESLIE MORALES
Hija