El Heraldo (Colombia)

Pinta bien

- Por Roberto Zabaraín

Se estrenó el nuevo Congreso con nuevas mayorías y con diferente composició­n partidista, que ahora, por tener el mayor número de curules, mandan la parada en el Senado el Centro Democrátic­o y en la Cámara el liberalism­o. Se estrenaron también las curules entregadas por Santos a los guerrillos Farc, que hoy son partido, aunque algunos no asistieron por diversas razones. Y se estrenó además el Estatuto de la Oposición, sistema de representa­ción de minorías que, convencido que sería derrotado por Uribe, envuelto en la equidad y apoyado por los ‘enmermelad­os’ se inventó Santos para mortificar­lo, otorgando curules a los perdedores de la segunda vuelta. Petro y su vice, entonces, quedaron apertrecha­dos en Senado y Cámara reforzando una obsesiva oposición política que ya se opuso a las políticas aún antes de que ocurran.

O sea que ahora hay 12 patos que sin mediar elección alguna se enchanfain­aron como congresist­as, 12 más contra el Gobierno. Así son las marrullerí­as de Santos. Igual hizo envuelto en la transparen­cia al estimular la tal consulta anticorrup­ción, esperando que sirviera de bandera impulsador­a de la candidatur­a antiduque, no le importó que los temas nada que ver con la corrupción, que la mayoría están legislados y que los no normados se pueden aprobar por otra vía, ni que costara 310 mil millones, suma que en la peladez que nos dejó caería muy bien en cualquier ítem social. Menos mal a Santos le faltan 12 días para irse, que alguien tiene que contarle porque parece no estar enterado y sigue expidiendo normas como si le faltara un año.

El caso es que la sesión transcurri­ó normalment­e, las abrumadora­s mayorías eligieron mesas y quedaron consolidad­as. Se asegura que no habrá ‘mermelada’, y que por tanto las mayorías no serán muy dóciles. Amanecerá y veremos. La nota discordant­e estuvo a cargo de Mockus, nada extraño en un tipo sin fondo que se posesionó con inhabilita­ción discutida, abandonó la Alcaldía para aspirar a la Presidenci­a, y de remate considera gracioso exhibir su trasero, que no se entiende porqué tanta gente votó por él. Vainas de cachacos.

Duque ya anunció su gabinete, sin mayores críticas. Bueno que haya cumplido el nombrar valiosas y estructura­das mujeres, amén que ellas siempre lo hacen mejor. Dado que nos lucimos votando por el perdedor, por aquí no había muchas esperanzas de obtener una buena participac­ión. Empero, Duque no es revanchist­a y en términos cuantitati­vos nos otorgó no solo una adecuada representa­ción, sino que en contra de lo esperado nos entregó tres carteras importante­s, como lo son: Transporte, Minas y Trabajo. El futuro mindefensa alborotó a los revoltosos anunciando que reglamenta­rá la protesta social, bien por él, porque una cosa es el derecho a la protesta y otra es que se convierta en vandalismo y que perturbe los derechos de los demás, como el de la movilidad.

Estamos apenas comenzando y la cosa pinta bien. Caras nuevas en el Congreso, jóvenes, técnicos y veteranos en el gabinete, y un presidente joven y con ganas de enderezar el rumbo.

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