“Esa boletería es nuestra y la garantía estaba pa’ eso”
El documento de la SIC describe las discusiones entre los socios Ticket Shop y Ticket Ya para desviar a la reventa entradas para ocho partidos en Barranquilla. Las empresas fijaron en un acta los precios para la boletería con sobrecostos de hasta un 350%,
–Esa era la joya de la Corona para pagar los créditos de Elías. –Si quieren hacemos otra reunión. –Esto no es de reuniones y papelitos (...). El negocio es de 3, y no suyo.
Mientras miles de fanáticos de la Selección Colombia esperaban ansiosos la medianoche del 8 de agosto del año pasado para comprar en el portal web de Ticket Shop una de las 6.000 boletas que supuestamente se venderían para el partido de eliminatoria al Mundial de Rusia 2018 frente a Brasil, en una oficina ubicada en el cuarto piso de edificio Camacol en el norte de Barranquilla se imprimieron y vendieron durante varios días 14.207 boletas a un reducido grupo de personas para la reventa.
Los buenos resultados de los revendedores que lograron ganancias que superaron los $4.200 millones, contrastaron con la decepción de los hinchas que no pudieron adquirir su entrada para el encuentro entre Colombia y Brasil que se jugó el 5 de septiembre de 2017 en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez, ya que en menos de 45 minutos se cerró la venta en línea.
En este partido, las boletas que tenían un rango de precios entre $60.000 y $270.000, fueron revendidas con valores de entre $270.000 y $800.000, por parte de la red orquestada por las empresas Ticket Ya y Ticket Shop bajo la mirada de la Federación Colombia de Fútbol (FCF).
Así lo indica la Resolución 53719 de 2018 de la Superintendencia de Industria y Comercio que formula pliego de cargos a la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), Ticket Ya y Ticket Shop y a varios directivos de la federación y de ambas empresas.
En total, a través del sistema presuntamente diseñado y ejecutado por ambas empresas, se habrían desviado 42.221 boletas de 8 de los 9 partidos de las eliminatorias a Rusia 2018 jugados en Barranquilla, con el fin de revenderlas a precios superiores generando ganancias por más de $13.000 millones.
CóMO COMENZARON. “El negocio” alrededor de las boletas de los partidos de la Selección Colombia, comenzó, según la Superindustria, con la empresa Ticket Ya, creada en 2011 en Cartagena y matriculada posteriormente en 2017 en Barranquilla, cuyo representante legal es Elías Yamhure y sus socios Rodrigo Rendón Cano, Rodrigo Rendón Ruiz, Medardo Romero, David Romero y Roberto Saer.
Como representante de esta empresa Rendón, ex- presidente del Real Cartagena, habría buscado a Ticket Shop, cuyo representante legal es César Carrero y a su gerente Iván Arce, para que presentaran oferta ante la Federación para obtener el contrato de operación de la boletería para las eliminatorias.
Rendón les dijo que tenían “casi garantizada” la contratación, por sus relaciones y contactos con la FCF. Ticket Ya aportaría los recursos económicos que se requerían y Ticket Shop, acreditaría el cumplimiento de los requisitos con su experiencia.
En efecto, Ticket Shop obtuvo la adjudicación de contrato en un proceso cuestionado por la SIC, que califica la propuesta presentada como “irracional desde el punto de vista económico” por el porcentaje de retorno de la inversión.
El valor del contrato que fue adjudicado el 19 de agosto de 2015, fue de $40 mil millones y le daba a la empresa los derechos exclusivos para vender comercializar y distribuir la boletería de las eliminatorias. La SIC asegura que Primera Fila de Cine Colombia fue la empresa que tuvo mejores calificaciones en los informes de evaluación. TICKET SHOP DELATA. Luego de que la SIC anunciara la apertura de una investigación por el incidente de la venta en línea de boletas para el partido Colombia-Brasil, Ticket Shop solicitó ser delator en el proceso. Sus representantes dieron declaraciones y aportaron pruebas que arrojaron luces sobre el caso, entre las que hay correos electrónicos, conversaciones de Whatsapp y actas, y otras.
Carreño en declaraciones a la SIC, asegura que los socios de Ticket Ya les dejaron claro como serían sus relaciones: “Somos nosotros los dueños del negocio, ustedes van a ser los intermediarios y como intermediarios, necesitamos que nos cobren”.
Esto implicaba que las mayor parte de las utilidades iban para esta empresa, luego que de descontaran los gastos operativos y una comisión del 2,5%.
EL NEGOCIO. Las investigaciones realizadas por la SIC apuntan a que Yamhure y sus socios, quienes crearon un grupo de Whatsapp llamado “Eliminatorias Mundial”, obtenían las boletas para presunta reventa y aprovechar las ganancias de los sobrecostos.
La cantidad de boletas que recibían Yamhure y sus socios, era establecida por ellos de acuerdo con las condiciones particulares de cada partido y se constituirían, según la SIC en “el primer eslabón de la reventa”. “Revendían las boletas al por mayor, imputando un primer sobreprecio”, señala la SIC.
Carreño explica en declaraciones a la entidad que: “Ellos nos pedían una cuota de boletería, creo que era de 3 mil, 4 mil, 5 mil boletas nos pedía Ticket Ya, que era la única a la que le vendíamos a ellos a precio nominal”.
“Al principio se suponía que era para patrocinadores, Alcaldía, empresas... después de un tiempo nos empezamos a dar cuenta de que esa boletería no era simplemente para compañías, sino que tenían otro uso, la verdad ...nunca vimos el tema de la reventa pero sí sabíamos que había una persona de dudosa reputación entre ellos que podría llegar a tener esos alcances con la boletería que les entregábamos”.
Sin embargo, al ser interrogado nuevamente por la Superintendencia el empresario concluye: “Ellos nos decían que Elías era muy influyente en Barranquilla en temas de negocios y usaba la boletería para tener más alcances con las alcaldías, para tener atenciones con mucha gente, pero lógicamente 3 mil boletas no todas se iban para el tema, estamos completamente seguros que una parte se iba para reventa”.
Se calcula que al menos 1 de cada 8 personas que ingresaron a los partidos de eliminatorias en Barranquilla, compró una boleta en reventa y que el algunos casos los sobreprecios llegaron hasta el 350%.
Esto se evidencia en un acta del 19 de mayo de 2017, en la que el grupo Ticket Ya establece una lista de precios de boletería “acordados”, donde el mínimo que corresponde a norte y sur que costaba oficialmente $60.000 iba a ser vendido en $270.000. Cabe recordar que estos eran precios a los que ellos les vendían a los mayoristas para su reventa.
REPONER INVERSIONES. Una de las razones del grupo Ticket Ya para exigir a Ticket Shop la entrega de boletas era recuperar las inversiones que hicieron para ganar la licitación con la FCF así se evidencia en las declaraciones de César Carreño (CC) a la Superindustria (S).
S: ¿A quién se le entregaba la boletería?
CC: Esa boletería se le entregaba a Elías.
S: ¿La recibía Elías? CC: Sí, recibía Elías o la asistente.
S: ¿Que se llama? C.C: Es una señora que se llama Leticia.
S: ¿En qué consistía el acuerdo con Ticket Ya para entregar la boletería?
C.C: El acuerdo era que nosotros teníamos que darles parte de la boletería para que ellos la comercializaran y teníamos claro que ellos la iban a vender a un mayor precio, lo que no sabíamos era a qué precio la vendía ni nos interesaba.
S: ¿Pero sabían que era un mayor valor?
C.C: Sí, era un mayor valor porque ellos aludían que habían hecho una inversión antes del contrato de nosotros con la Federación.