La herencia de Santos
Que tarea tan difícil la que le espera a nuestro nuevo presidente Iván Duque, según el discurso de Ernesto Macías y el cartel aparecido en EH y al parecer también en otros periódicos del día 7 de agosto: La herencia de Santos. Dicho cartel aparece firmado por el Centro Democrático y da cuenta del estado problemático en que se encuentra actualmente Colombia. Algo que se puede entender como una simple crítica al gobierno del pre- sidente saliente; quien, a mi modo de ver, trató de hacer todo lo posible para lograr un entendimiento nacional. Algo muy difícil de lograr, pero que es, exactamente, lo primero que tendrá que tratar de hacer el nuevo presidente si quiere cumplir con todo lo que con tanta seguridad prometió en su discurso de posesión y también algo que le reconocieron a Juan Manuel desde el momento en que, desde muy lejos de Colombia, le entregaron el premio Nobel de la Paz.
De acuerdo a mi modo de entender, el nuevo presidente Duque, este viejo –de acuerdo con las canas que presenta–, está muy inclinado a tener en cuenta el menor de los detalles. Lo que me hace pensar que dependerá totalmente del qué diran. Estará muy pendiente de todas las criticas al gobierno anterior y posiblemente de todas las recomendaciones que le hicieran algunos de los patrocinadores que conocemos, plenos de odio, de triunfalismo y también de cierta astucia que los pone en peligro de constituirse en espectáculo judicial durante su gobierno.
No creo y veo imposible que la disposición de dar gusto a todos en el menor de los detalles sea la forma de lograr un buen gobierno.
Carlo Salberti Van D´Hernán