Cartagena y B/quilla, entre las de menor desempleo
La tasa de la capital del Atlántico fue de 8,4%, según el Dane.
Tres capitales costeñas, Cartagena, Barranquilla y Santa Marta, se ubicaron entre las cinco con menor tasa de desempleo en el país durante el trimestre móvil junio-agosto de 2018, con 8%; 8,4% y 8,4% respectivamente.
El informe del mercado laboral del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) señala que en agosto la tasa de desempleo a nivel nacional fue de 9,2%.
Dewin Pérez, director del Observatorio del Mercado Laboral de Cartagena y Bolívar (Ormet), señaló que la tasa de desempleo en Barranquilla disminuyó al pasar de 9,1% (2017) a 8,4% (2018), y se situó como la tercera menor en Colombia, superada por Cartagena y Bucaramanga.
“Este comportamiento se explica debido a que el ritmo de crecimiento de la generación de empleo fue más alto que el aumento del número de personas que entraron al mercado de trabajo”, dijo Pérez.
Considera preocupante que los indicadores de empleo agregados están sustentados en creación de empleos de mala calidad, pues los ocupados por cuenta propia siguieron ganando peso, al pasar del 45% al 48%.
Barranquilla, además, comparte segundo puesto con Cúcuta en la mayor tasa de subempleo del país, esto muestra un alto grado de insatisfacción. “En la capital del Atlántico, 272 mil trabajadores están insatisfechos con el empleo actual, especialmente porque estarían dispuestos a trabajar más horas, y 119 mil trabajadores sienten que están ejerciendo una actividad para la cual no estudiaron”, sostuvo el experto.
Para el caso de Cartagena, que tuvo la menor tasa del país, asegura que la reducción de la tasa de desempleo de 10,5% a 8,0% es más el reflejo de una menor participación laboral y una leve reducción en la tasa de ocupación. “En Cartagena muy probablemente por desaliento, la gente poco a poco deja de buscar empleo, no porque esté mejor, sino que considera que sería perder el tiempo”, agregó.
En Santa Marta, que fue cuarta con menor desempleo, se refleja una baja participación laboral, con un lento crecimiento de la población económicamente activa (0,9%) frente a la población en edad laboral (2,1%), es decir, los jóvenes samarios no entraron a presionar el mercado laboral.