Bolívar, Córdoba y Sucre, en alerta por los efectos de Hidroituango
En Altántico, el cierre de las compuertas ha incidido en los descensos de los niveles del río Magdalena Gobernadores y congresistas se pronuncian sobre la situación.
El cierre de las compuertas del proyecto Hidroituango, el pasado martes, ya ha generado afectaciones en los departamentos de Bolívar, Córdoba, Sucre y Atlántico, debido a la disminución considerable de los niveles de los ríos Cauca y el Magdalena.
Frente al tema, gobernadores de los departamentos mostraron su preocupación y solicitaron a las autoridades atender la situación para evitar “daños irreversibles” en el ecosistema y zonas aledañas a las riberas de los cuerpos de agua.
El gobernador de Bolívar, Dumek Turbay, fue uno de los primeros en referirse al tema y tildó como “grave” la situación que se viene registrando en la cuenca del río Cauca.
“Las afectaciones que ya se vienen sintiendo río abajo después de la represa, se están viendo reflejadas en municipios como San Jacinto del Cauca, Achí, Montecristo y Magangué. El Cauca es el gran afluente del río Magdalena y eso hoy es gravísimo. Hablé con Federico Gutiérrez, alcalde de Medellín, con Luis Pérez, gobernador de Antioquia y ellos nos piden calma y que seamos solidarios. Lo entendemos, pero la afectación es lamentable. Queremos que la crisis se pueda atender, no queremos lamentar nada”.
Turbay señaló que “no se les manifestó” del cierre de las compuertas de la hidroeléctrica y se enteró “por los medios de comunicación”. “Sabíamos que el cierre iba a traer consecuencias. Estamos ante una emergencia que se debe atender a tiempo”, dijo.
El gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, señaló que la situación de Hidroituango “es muy complicada” porque cada día aparece un nuevo evento que complica todas las maniobras relacionadas con la hidroeléctrica.
“La retención de ese gran volumen de agua ha causado un impacto severo en materia ambiental en la cuenca del río Cauca y del Magdalena, con consecuencias impredecibles en la ecología. En el Atlántico ya estamos sintiendo los efectos, sumado a la época de sequía. Tenemos una baja del río que se incrementó por el cierre de las compuertas”, manifestó el mandatario del Atlántico.
EN RIESGO 250 MIL PERSONAS DE LA MOJANA. El gobernador de Sucre, Édgar Martínez, manifestó que por medio de una carta le solicitó a las directivas de Empresas Públicas de Medellín (EPM) que les brinde el acompañamiento técnico y financiero en todas las fases del conocimiento de riesgo, reducción de riesgo y manejo de desastres no solo en la asistencia humanitaria sino toda la logística que se requiera en los procesos de gestión de riesgo de desastres a los habitantes del sur de Sucre.
Esto teniendo en cuenta que el río Cauca, que atraviesa a La Mojana sucreña, en los últimos tres días ha registrado el nivel más bajo de su historia, lo que afecta la pesca, la navegabilidad y la economía de la región. Es así como Guaranda, Majagual, Sucre (Sucre), San Marcos, Caimito y San Benito Abad, según el gobernador, están en el área de incidencia de riesgo que genera el proyecto.
De seguir la situación así, las afectaciones tocarían a unas 250.000 personas.
En Guaranda, por ejemplo, hay bastantes playas por el bajo nivel del río Cauca. Eso no permite pescar y mucho menos navegar. Por ende el transporte náutico está semiparalizado.
“Hemos seguido de cerca el conjunto de actividades desarrolladas por EPM, lo que genera dentro de poco
tiempo una disminución en el caudal del río Cauca lo que afecta la navegabilidad, el sector pesquero, agropecuario, la cadena productiva, la cadena alimenticia, y en término general el deterioro de la calidad de vida y la economía de las personas que habitan aguas abajo”, manifestó el gobernador.
HABLAN LOS CONGRESISTAS. Representantes a la Cámara y senadores también emitieron sus reacciones frente a la situación en la hidroeléctrica Hidroituango.
El senador José David Name señaló que en los próximos días “se verán” en el Atlántico y en toda la ribera del Magdalena “descensos” más rápidos de los caudales.
“El daño ecológico que está teniendo la mala planificación y las malas decisiones de Hidroituango van a dejar sus huellas. Los entes de control deben decirle al país quiénes son los responsables. El país debe aprender de sus errores, no podemos seguir construyendo estructuras que ponen en peligro a las comunidades y al medio ambiente”, expresó Name.
Por su parte, Cesar Lorduy, representante a la Cámara por el Atlántico, señaló que lo que está ocurriendo es “una tragedia inevitable”
“Por muchas explicaciones, análisis y evaluaciones que se hayan hecho y las que se sigan haciendo, cerrar el caudal de un río como el del Cauca inevitablemente causa lo que hemos venido observando y lo que falta”, manifestó Lorduy.
La escasez de agua en el afluente del Cauca, río abajo de Hidroutuango, y en la cuenca del Magdalena –señaló el congresista de Cambio Radical– demuestra hasta dónde puede llegar una emergencia. ¿En dónde está la vigilancia, quién protege a los pescadores, quién protege las especies afectadas y al río?”, se preguntó Lorduy.
La representante a la Cámara Martha Villalba señaló que ya el departamento “viene atravesando” las consecuencias del cierre de la hidroeléctrica, además que “se desconoce la afectación” que puede generar el bajo caudal del río Cauca en esta importante arteria fluvial.
“Alarma que los niveles en el río empiecen a descender, tal como está ocurriendo actualmente en el municipio de Suan, lo que afectaría de una u otra forma no solo nuestro desarrollo y nuestra competitividad, sino que también se estarían generando problemas de tipo ambiental, social y económico”, señaló la congresista a este medio.