El Heraldo (Colombia)

‘El Tiburón’ mejoró de la mano de Teo

El barranquil­lero, con su experienci­a, calidad y liderazgo, comandó el ataque tiburón en la victoria 2-0 ante Bucaramang­a en la Copa Águila E “Yohandry nos puede dar una mano”, consideró E “Aquí el que se duerma, pierde el puesto”, apuntó. “Nuestra priori

- Por Rafael Castillo Vizcaíno

Frenó solito. Tranquilo, sonriente. No hubo necesidad de llamarlo demasiado. Teófilo Gutiérrez llegó por su cuenta al numeroso grupo de periodista­s que detrás de una valla lo esperaban con cámaras y micrófonos en la zona mixta del estadio Roberto Meléndez luego de la victoria de Junior 2-0 sobre Bucaramang­a, en el partido de ida de los octavos de final de la Copa Águila, el jueves pasado.

El triunfo es felicidad, ganas de hablar y buen humor para el delantero barranquil­lero. “Primero las mujeres, primero las mujeres”, le dice en tono jocoso a un periodista para que ceda el turno del interrogan­te inicial a una de sus colegas.

En medio de la respuesta a la pregunta que abrió el diálogo, Rafael Robayo, veterano volante del Bucaramang­a, sorpresiva­mente le pasó una mano por la cara a Teo, que se volteó de inmediato para ver al autor de ese gesto de camaraderí­a, típico entre los futbolista­s. Al notar que era el mediocampi­sta bogotano, le dio un fuerte abrazo.

Se despide de Robayo, que no alcanzó a participar en el partido, y prosiguió la charla con los medios.

“Los que hemos jugado, lo hicimos muy bien, así que todo el mundo está apto y en puntica de pie para lo que viene”, comenta Teo antes de que el técnico Julio Avelino Comesaña interrumpa un canto que traía y comente mirando a los miembros de la prensa y señalando al atacante: “¡Qué partido el que se jugó, eh!”.

Gutiérrez sonrió y siguió entregando declaracio­nes sobre el despertar ofensivo de Junior, que se presenta con su retorno a la formación titular. Y no es pura coincidenc­ia, con s u experienci­a, calidad y conducción, cuando está enchufado, es la batuta que afina el toque-toque rojiblanco. Impone el ritmo.

“Este es un equipo que tiene muy buenos jugadores, pero ante todo tenemos que mostrar esa identidad de juego que nos caracteriz­a. Sobre todo la forma como lo hacemos, por momentos distraemos al rival y lo cansamos para luego hacer los goles. Hay que trabajarlo con mucha intensidad, con sociedades, lo cual es muy importante en un equipo”, expresa el jugador de 34 años de edad.

Terminó contento con el pegar primero en la serie ante los búcaros y por el desempeño colectivo e individual de compañeros como David Murillo, autor del segundo gol.

“David se lo merece porque es un gran profesiona­l y aquí el que se duerma, pierde el puesto, así que esperamos que pueda seguir con el ritmo con el que anda”.

De cara a lo que viene, Gutiérrez se emociona con la posibilida­d que surge con el fichaje del venezolano Yohandry Orozco. “Yohandry nos puede dar una mano. Viene a un equipo grande y tiene que demostrar. Espero que podamos tener sociedades y ser un equipo letal”.

Sobre Comesaña y la frase en la cual lo considerab­a como “el mejor atacante del fútbol colombiano en los últimos años”, Teófilo se mostró halagado y manifestó: “Comesaña ya me conoce, es mi papá futbolísti­camente, me ha enseñado mucho y es el viejo del equipo, lo queremos mucho”.

Y en cuanto a los elogios que surgieron a partir de las palabras de Comesaña, Teófilo declaró: “Son flores, pero a la vez es un compromiso que debo tener cada día, en cada entrenamie­nto, en cada partido. Mis compañeros me hacen saber eso”. Secuencia de la anotación que abrió el camino del triunfo. Edwuin Cetré recibió el pase de Hinestroza y despachó un zurdazo. No le pudo pegar plenamente al balón, pero alcanzó a desviarlo lo suficiente para vencer al arquero del Bucaramang­a, James Aguirre.

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FOTOS: JESÚS RICO Teo y Hernández.

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