Córdoba mantiene alerta amarilla por fuertes lluvias
Aunque el riesgo bajó, niveles de los ríos han subido. Recomiendan atender recomendaciones.
MONTERÍA. Los organismos de atención y prevención de desastres en Córdoba sostienen que las alertas por causa de las lluvias en el departamento pasaron de alerta naranja, a alerta amarilla, es decir, el riesgo bajó.
Con base en el reciente informe presentado por la Oficina Departamental de Mitigación del Riesgo, hasta el momento es reducida la probabilidad de incrementos súbitos en los niveles de la cuenca baja de los ríos San Jorge y Sinú.
Iván Tapia Morfil, director de la Oficina Departamental de Gestión del Riesgo, dijo que en el río Sinú los niveles de los ríos, se mantienen altos, en especial en la parte baja de la cuenca, por lo que se recomienda especial atención en los centros poblados de Montería, Cereté, San Pelayo, Cotorra, Lorica, Carrillo, Morales y San Bernardo del Viento, así como en la Ciénaga de Momil.
Otra de las alertas hidrológicas detectadas por las autoridades está relacionada con la acción que demuestra el río Canalete y otros arroyos que desembocan en el Caribe, y que son surtidos de agua por parte de las conocidas corrientes de monte.
“En esta zona también mantenemos la alerta amarilla por la probabilidad de crecientes súbitas en el río Canalete y otros arroyos que van directo al mar Caribe”, indicó el funcionario de la Gobernación de Córdoba.
LLUVIAS MODERADAS O FUERTES. Para el tema de pescadores y usuarios de embarcaciones pequeñas, las autoridades recomendaron consultar previamente con las capitanías de puerto antes de zarpar, pues las labores de monitoreo indican el registro de lluvias moderadas, con posibilidad de actividad eléctrica y rachas de viento.
Las autoridades también hacen revisiones ante las posibilidades de deslizamiento; por esta circunstancia se encuentran en alerta amarilla los municipios de Montelíbano, Puerto Libertador, San José de Uré, Tierralta y Valencia, ubicados en el sur del departamento de Córdoba, donde se le pide a los habitantes que estén atentos a la evolución de las condiciones meteorológicas.