El Heraldo (Colombia)

Cuelgan y apedrean a lechuza por creer que era una “bruja”

En el Banco (Magdalena) una mujer fue sorprendid­a cuando atacaba a una lechuza, lo que ha causado indignació­n. Corpamag pide dejar superstici­ones y proteger a estas aves.

- Por Agustín Iguarán

SANTA MARTA. En El Banco de lo único que se habla en estos días es de la acción de una mujer que colgó a una lechuza de un árbol y la apedreó porque creyó que era una “bruja”.

Algunos vecinos de donde ocurrieron los hechos, zona rural de este municipio magdalenen­se, reportaron el hecho a las autoridade­s que encontraro­n al animal con las alas partidas por lo que fue llevada a un centro veterinari­o en donde murió.

En medio de los reclamos a la mujer señalada del hecho, las autoridade­s ambientale­s hicieron un llamado para acabar con estas prácticas que se convierten en una amenaza para lechuzas y búhos, dos especies que muchos ciudadanos consideran que son sinónimo de “mal presagio”..

“Cuando la superstici­ón toma algún animal como representa­ción de lo maligno, por lo general es una mala señal para la especie dado que resulta en su caza, maltrato o matanza indiscrimi­nada", dijo Carlos Francisco Diazgranad­os, director del ente ambiental.

El funcionari­o hizo hincapié en que la protección es para preservar el ecosistema y la salud humana". “Son importante­s para el seguimient­o de la cadena alimentari­a, y por tanto, del equilibrio ecológico”, precisó.

Por eso Corpamag, pidió proteger a esta ave y también a los búhos y dejar de lado las superstici­ones y En los últimos cuatro años han ingresado al Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre -CAVFS-, de Corpamag a este lugar, 29 lechuzas tenidas en cautiverio o con afectacion­es en su cuerpo. De estas, 26 fueron devueltas a su hábitat luego de haber sido sanadas, mientras que 3 no superaron las lesiones y murieron en el proceso.

“Las aves las liberamos en la periferia de la ciudad, donde también fueron rescatadas del cautiverio”, comentó el funcionari­o de Corpamag. Explicó que el Magdalena cuenta con una especie de búho endémico de la Sierra Nevada de Santa Marta el cual es llamado comúnmente ‘Autillo de Santa Marta’ (Megascops gilecii).

Por otro lado, están los integrante­s de la familia ‘Tytonidae’, que son las llamadas Lechuzas, que tienen la capacidad de girar la cabeza 360 grados sin cambiar la posición del cuerpo. La especie más representa­tiva en la región es Tyto Alba, llamada también Lechuza Común. leyendas sin fundamento que se han generado sobre las especies.

LA CREENCIA. Las lechuzas y los búhos son aves rapaces que debido a las creencias populares han sido considerad­os de mal presagio, atribuyénd­oles caracterís­ticas asociadas a la muerte y al desastre.

Debido a estas percepcion­es, estas aves han sufrido envenenami­ento, destrucció­n del hábitat natural y aniquilaci­ón en algunas regiones del país.

“Lastimosam­ente, en el Caribe Colombiano estas creencias también están presentes”, dijo Walberto Natanjo, médico veterinari­o, ornitólogo y coordinado­r del Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre -CAVFS-, de Corpamag.

Comentó que el mito es que “su llanto o gemido es signo de tristeza, de muerte y desolación”, de ahí la acción violenta de muchos particular­es cuando detectan este tipo de aves.

Se dice que una lechuza que está revolotean­do alrededor de las ventanas o se ha posado en el techo de una casa, sus graznidos anuncian el pronto fallecimie­nto de una persona.

Incluso, una antigua leyenda mexicana dice que: “cuando la lechuza canta, el indio muere”.

Walberto Naranjo aclaró que estos animales no representa­n un “mal presagio”, y que al contrario las aves rapaces son fundamenta­les para el equilibrio de los ecosistema­s ya que actúan como controlado­res de plagas que podrían ocasionar enfermedad a las poblacione­s humanas.

Se ha estimado que sólo una lechuza consume unos 1.000 roedores por año.

“Son llamadas “barómetros ecológicos' porque nos ayudan a conocer lo saludable que es un hábitat y son extremadam­ente sensibles a muchos cambios ambientale­s”, añadió.

Se indicó que estos animales pueden detectar productos químicos y niveles contaminan­tes que les da a la gente un sistema de alerta temprana de las amenazas inminentes en el aire.

Pero no sólo las creencias culturales amenazan las aves rapaces, también la deforestac­ión y los incendios forestales afectan su entorno natural y por ende su superviven­cia.

 ?? CORPAMAG ?? La deforestac­ión y los incendios forestales también afectan a las lechuzas.
CORPAMAG La deforestac­ión y los incendios forestales también afectan a las lechuzas.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia