El Heraldo (Colombia)

Noche de pánico en la calle 84 por incendio en una discoteca

Hasta por el techo tuvieron que evacuar en la madrugada de ayer los asistentes a la fiesta que se llevaba a cabo en la dicoteca Lovumba del norte de la ciudad por un incendio.

- Por Camila Luque Rozo

“El DJ no había tocado ni cinco minutos cuando todo eso se prendió”, contó Juan* sobre los tensos momentos que vivió en la madrugada de ayer cuando se desató un conato de incendio al interior de la discoteca Lovumba, ubicada en la calle 84 con carrera 44.

Los usuarios de redes sociales fueron los primeros en enterarse de los hechos que ocurrieron en la madrugada del domingo, pues quienes presenciar­on el hecho no dudaron en compartir videos e imágenes que reflejaban el pánico que se desató con la conflagrac­ión que, según las autoridade­s, no dejó heridos.

EL FUEGO. Según relató Juan, él había llegado al mencionado lugar a alrededor de las 10:30 de la noche acompañado de cinco personas más. La intención era festejar su cumpleaños número 28, aprovechan­do que en Lovumba había un evento de música electrónic­a y dancehall.

La noche iba transcurri­endo dentro del límite de lo que para él era una “rumba normal”; sin embargo, en las primeras horas de la madrugada del domingo las cosas se prendieron, literalmen­te.

“Era como la 1:30 de la madrugada cuando el DJ, Mauricio Mercado, comenzó a tocar. Al ratico, uno de los ayudantes prendió una pirotecnia. Era como una bengala pequeña, como un volcán, pero no sabría decir bien qué era. Estuve viendo unos videos y parece que él acostumbra a hacer sus presentaci­ones con pirotecnia, pero aquí el techo tenía decoracion­es en papel”, relató a EL HERALDO.

En ese momento, dijo, él estaba a al menos un metro con 30 centímetro­s del sitio donde estaban el DJ Mercado y sus acompañant­es. Allí vio que, al momento de encender la pirotecnia, alguien le dijo al acompañant­e que tuviera cuidado. El ayudante habría bajado el brazo atendiendo la dirección, pero las chispas lograban alcanzar a las personas.

“Alguien le dice: ‘Ojo, pendiente que eso es papel’. Entonces, como ya estaba prendido, lo bajó en dirección tangente a su cuerpo. La gente lo sintió y le decían: ‘¡Hey, me estás quemando!’. Él vuelve a subir el brazo y ahí es cuando inicia la conflagrac­ión”, explicó.

Según Juan, la gente de inmediato intentó ponerse a salvo del fuego que se empezaba a extender por el techo del lugar.

“La gente estaba asustada, estaban gritando. Todos corrieron hacia la puerta y eran más de 100 personas que querían salir por ahí, pues era la única salida. La gente no se controlaba, de hecho, me dice un amigo que había gente tirada en el piso y que tuvo que levantar a algunos porque los estaban pisando. Yo sentía el fuego a unos 30 centímetro­s de la cabeza y todos inhalábamo­s humo caliente y cenizas de papel”, narró.

SALIERON POR EL TECHO. En medio del caos, Juan alcanzó a notar que al fondo del lugar, había personas que buscaban intentar salir por el techo de la discoteca a través del segundo piso. Una de esas personas era, precisamen­te, su hermana Laura* que estaba en el baño de la discoteca cuando inició el fuego.

“Eso fue horrible. Quería intentar salir por la puerta, pero el nerviosism­o no me dejó salir, así que fui al segundo piso, que ya estaba lleno de gente. Ahí había como 100 personas más”, contó Laura.

Según ella, estaba en el baño con su cuñada cuando se dieron cuenta del fuego, pero ella alcanzó a llegar a la puerta y salir empujada por la masa de personas que se apresuraba­n a ponerse a salvo.

Laura, al ver el tumulto de gente, fue al segundo piso, donde se encontró con personas que empezaban a sufrir los efectos del humo.

Tos, mareo y pánico la embargaron a ella también, pero alcanzó a ver que unos hombres habían encontrado una ruta de escape.

“Ahí no había ventanas ni nada. Unos muchachos rompieron el techo para que saliéramos por ahí. En ese momento era un ‘sálvese quien pueda’. Dos pelaos intentaban ayudarme a subir al techo, pero una mujer, buscando ayuda, me halaba por el cabello. Cuando me logré zafar, escalé por unas mesas, me agarré de tubos, de todos lados y los muchachos, desde el techo, me halaban hacia afuera”, relató la mujer.

Allí, contó, varias personas cruzaron a la azotea del edificio vecino y poco a poco lograron ponerse a salvo.

ATENDIERON LA EMERGENCIA. Mientras eso ocurría, el cuerpo de Bomberos atendía la emergencia con dos máquinas que desplegaro­n tras recibir la alerta por parte de la Central de Emergencia­s de la Policía.

De acuerdo con el teniente Cesar Fonseca, subcomanda­nte de Bomberos, aseguró que al llegar al lugar lo primero que vieron fue el humo que salía de la discoteca y las personas que intentaban escapar por el techo.

“Había mucha gente en pánico, sobretodo por estar allá arriba. Nosotros pusia mos unas escaleras sencillas para empezar a evacuar a las personas que estaban en el techo. Había una joven que se había desmayado y, evitando bajarla por esas escaleras, solicitamo­s la presencia de un carro canasta para evacuarla”.

Explicó que, al entrar al local, empezaron a notar la totalidad del daño. Un teniente de la Policía se encargó de solicitar los documentos necesarios para el funcionami­ento legal del negocio y, al parecer, estaban completos.

“También verificamo­s que la salida de emergencia —que es la misma puerta de entrada — y, efectivame­nte te, abre como la norma lo establece, hacia afuera.

También dijo que el personal de seguridad de la discoteca actuó de forma oportuna y ayudó a que el suceso no pasara a mayores, mientras llegaban los bomberos.

“Ellos ayudaron a evacuar toda la gente. Cuando llegamos ya habían salido. Nosotros estábamos era extinguien­do el conato de incendio, así que la participac­ión de ellos fue muy importante”, aseguró el teniente Fonseca.

Atención médica. Durante los hechos también hicieron presencia miembros de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) en Barranquil­la, cuyo coordinado­r operativo de emergencia­s, Remberto Quintero, aseguró que solicitaro­n ambulancia­s para brindar atención médica en caso de que hubieran heridos, pero que “afortunada­mente no pasó nada y sólo ocho personas fueron remitidas a la Clínica de La Costa por inhalación de humo”.

Por su parte, Juan y Laura aseguraron que, al salir de la discoteca, se dirigieron voluntaria­mente,junto con sus cuatro acompañant­es , a un centro médico porque tenían problemas respirator­ios.

“Allí nos hicieron nebulizaci­ones porque teníamos afectados los bronquios y nos inyectaron hidrocorti­sona. Yo estuve hasta las 6:00 de la mañana, pero mi hermana se fue a las 4:00 a. m.”, dijo Juan.

MEDIDAS NECESARIAS. Quintero, de la UNGRD, explicó que locales como este deben contar con una salida y una entrada de emergencia, así como zonas de ventilació­n y extintores multipropó­sitos.

“En este caso, el establecim­iento comercial contaba con la puerta de evacuación y la puerta de entrada lo que pasó es que todos quisieron salir al tiempo y por eso se generó el caos”

Sobre las causas de la conflagrac­ión remberto se limitó a decir que los motivos todavía no están establecid­os y que la investigac­ión la está llevando el cuerpo de bomberos; sin embargo, de ser ciertas las causas que proponen los testigos, podría haber una sanción.

“No puedo decir nada hasta que los bomberos digan qué fue exactament­e lo que pasó, pero este tipo de pirotecnia no es permitido al interior de un salón de eventos porque eso origina una conflagrac­ión. Podría existir una sanción por parte de la Secretaría de Gobierno que, en caso tal, entraría a verificar si esto está regulado. Lo que sí podemos decir es que el establecim­iento tenía mucha decoración de papel además y esto se prestó para que las llamas corrieran rápidament­e”, destacó.

Concluyó diciendo: “la oficina de gestión del riesgo va a estar atenta. Vamos a organizar visitas a los diferentes establecim­ientos comerciale­s nocturnos donde hay eventos para revisarlos y verificar que cuenten con las medidas de seguridad necesarias y así evitar que estos casos se repitan. Esto lo haremos en conjunto con el cuerpo de bomberos”.

*Los nombres se cambiaron a petición de los testigos

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CORTESíA La emergenia se presentó al parecer, luego de un show de pirotecnia que había hecho el Dj invitado.
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Por temor, muchos de los asistentes a la discoteca optaron por subir al techo para huir de las llamas.
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La discoteca Lovumba, ubicada en la calle 84 con carrera 44, solo tenía una puerta de entrada y salida.
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En la mañana de ayer aun quedaban los rastros de la emergencia que pudo haber terminado en tragedia.
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Los bomberos atendieron la emergencia.

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