Niegan vínculo de Jair Bolsonaro en crimen
Una fiscal brasileña negó ayer que un implicado en el asesinato de la concejal Marielle Franco pidiese visitar al presidente Jair Bolsonaro el día del crimen, contrariamente a lo afirmado por el portero del complejo de Rio de Janeiro donde viven el mandatario y el presunto autor de los disparos. La divulgación por TV Globo de declaraciones del portero a la policía que investiga el caso provocó una airada reacción del presidente ultraderechista, que insinuó que se trataba de “una canallada” que podría estar buscando su renuncia. La planilla del complejo en la lujosa zona de Barra de Tijuca indica que el 14 de marzo de 2018, pocas horas antes del asesinato de Franco, el expolicía Élcio Queiroz indicó en la portería que pretendía visitar la vivienda número 58, donde residía Bolsonaro, aunque fue a la 65, perteneciente a Ronnie Lessa, el presunto autor de los disparos, afirmó la fiscal Simone Sibilio en rueda de prensa. Las grabaciones conservadas demuestran sin embargo que el portero “llamó por el teléfono interno a la vivienda 65 y que la persona que lo atendió fue Ronnie Lessa”, agregó la fiscal. Según las filtraciones obtenidas por Globo, el portero declaró a la policía que había llamado a la casa del “señor Jair [Bolsonaro]” y que este le había respondido. Sin embargo, la televisora señaló en su reportaje que el entonces diputado y precandidato presidencial se hallaba ese día en Brasilia. La fiscal Sibilio dijo que el portero pudo haberse equivocado.