El Amira debe conservarse y seguir siendo un teatro Arquitectos,
Ingenieros, gestores culturales, académicos y autoridades aseguran que el Teatro Amira de la Rosa debe integrarse a un complejo cultural para su autosostenibilidad.
El presente y futuro del Teatro Amira de la Rosa, una edificación ‘dormida’ y que guarda un sinnúmero de recuerdos para la comunidad barranquillera, se convirtieron en los motivos para reunir a autoridades distritales y departamentales, arquitectos, ingenieros, gestores culturales y académicos.
Tres años después de que este emblemático centro cultural cerrara sus puertas, la ciudadanía ha mostrado su interés en que este sea conservado como legado de la arquitectura moderna en ‘La Puerta de Oro de Colombia’.
Y así quedó ratificado durante el encuentro que se desarrolló en la mañana de ayer en las instalaciones de EL HERALDO, luego del anuncio realizado por las directivas del Banco de la República de convertir el Teatro Amira de la Rosa en un complejo cultural.
“Este encuentro mostró la unanimidad de la comunidad barranquillera en mantener el teatro en sus actuales dimensiones”, sostuvo Marco Schwartz Rodacki, director de EL HERALDO.
En medio de este proceso de salvaguarda del patrimonio, la ciudadanía ve con buenos ojos que se integre el Teatro Amira de la Rosa a un complejo cultural, puesto que sería la “solución” a la búsqueda de opciones para su autosostenibilidad y perdudar su legado.
“Bienvenido sea el Complejo Cultural, que llegará a enriquecer el territorio cultural que también lo conforman el Museo del Carnaval, el Museo del Caribe, la Fabrica de Cultura y otras edificaciones destinadas a esta industria”, explicó Esteban Páez, presidente de la Sociedad Colombiana de Arquitectos (SCA) regional Atlántico.
Además, varios gestores culturales mostraron su inconformismo con algunos señalamientos “sin fundamentos” hacia el Banco de la República como ente encargado de la administración del teatro.
“Nosotros también somos culpables de la situación con la que el Banco de la República está navegando. Ellos se sienten prisioneros de unos barranquilleros que quieren su teatro en las mejores condiciones y hasta hace poco tienen toda la potestad sobre el inmueble”, sostuvo Gloria Peña, directora de la Academia de Danzas Gacho y Gloria Peña.
Asimismo, expusieron que el plan de acción debe tener en cuenta las normativas vigentes y que pretenden la conservación del patrimonio en la ciudad.
“Con el nuevo Plan de Manejo Especial de Protección (Pemp), este sector está regulado por una normativa de protección. El Teatro Amira de la Rosa está vinculado al Plan Nacional de Teatros, liderado por el Ministerio de Cultura y así se puede adecuar a los estándares mínimos exigidos a nivel internacional”, agregó Salvador Coronado, arquitecto y profesor de tiempo completo del Programa de Arquitectura en la Universidad Autónoma del Caribe.
Además, los asistentes a la tertulia hicieron un llamado a los directivos del Banco de la República para que presenten un proyecto preliminar del plan de intervención al Teatro Amira de la Rosa, teniendo en cuenta que en marzo del próximo año deben ser presentados ante el Ministerio de Cultura para su evaluación.
“Nosotros no conocemos un proyecto de lo que piensan hacer con el teatro. La comunidad barranquillera quiere ver el diseño, a que le apuestan con el Amira de la Rosa”, indicó Juan José Jaramillo, secretario de Cultura, Patrimonio y Turismo del Distrito de Barranquilla.
Asimismo, Jaramillo expresó que existe una posibilidad de que el Banco de la República ceda el Teatro –luego del proceso de intervención– al Distrito.
“Ellos han expresado que en Barranquilla hay un modelo atípico, del cual no tienen mucho conocimiento. Existe la posibilidad de que entreguen el teatro al Distrito para su administración”, sostuvo el funcionario. Asimismo, Jaramillo confirmó que en las primeras semanas de enero se cumplirá una reunión entre las directivas del Banco de la República con Jaime Pumarejo, alcalde electo de Barranquilla, y Elsa Noguera, gobernadora electa del Atlántico, para explicar los avances en el proceso del teatro.
Por último, los asistentes a la tertulia se mostraron de acuerdo con que el teatro vuelva a abrir sus puertas en 2023, teniendo en cuenta la magnitud de las obras que se desarrollarán en su conjunto.
“Existen los recursos y la comunidad clara está de acuerdo con la sostenibilidad del teatro. Aún así, hablar del año 2023 como fecha límite para que esté listo el Complejo Cultural del Amira de la Rosa es sensato, aunque también se puede apostar a dos años”, puntualizaron los asistentes a la tertulia.