Disturbios en París en primer aniversario de chalecos amarillos
Debilitado pero aún vivo, el movimiento popular de los “chalecos amarillos” franceses, surgido hace exactamente un año, movilizó ayer a miles de personas en el país, sobre todo en París, donde se registraron actos de violencia y más de un centenar de detenidos.
Las manifestaciones congregaron a 28.000 personas en toda Francia, 4.700 de ellas en París, según el ministerio del Interior. La última participación similar fue el sábado 9 de marzo, con 28.600 manifestantes en todo el país. Por su parte, el movimiento dio una estimación global de 39.530 participantes este sábado.
Un año después del inicio de este movimiento sin precedentes, la Place d'Italie, en el sur de París, fue escenario de violentas acciones, con coches y contenedores incendiados y monumentos y mobiliario urbano destrozado, según constataron periodistas de la AFP. La policía antidisturbios respondió con gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersar a la multitud.
Se presentaron disturbios en el barrio de Les Halles, uno de los puntos céntricos de la capital francesa, con comercios, bares y restaurantes. En la noche, la policía anunció 147 detenciones, y según la fiscalía de París, 129 personas fueron puestas en detención provisional.
El 17 de noviembre de 2018 más de 300.000 personas, la mayoría vestidos con un chaleco amarillo fluorescente, salieron a las calles de Francia para protestar por un impuesto sobre el combustible.