Playas cumplen restricciones en el Atlántico
Aseguran que la medida puede ser contraproducente. Solicitan ayudas por parte de las autoridades.
EL HERALDO recorrió este martes los balnearios del Atlántico y pudo constatar el cumplimiento del cierre de las playas ordenado por la Gobernación del departamento. Los caseteros expresaron su preocupación por la falta de visitantes y pidieron a las autoridades medidas para compensar las pérdidas económicas que está sufriendo el sector del turismo en la región.
Completamente solos. Ese fue el panorama que se vivió en los balnearios del departamento de Atlántico durante este martes luego de que entrara en vigencia el cierre ordenado por las autoridades para evitar la propagación del coronavirus.
Un equipo periodístico de EL HERALDO realizó un recorrido por varias playas del departamento y pudo constatar el cumplimiento de la mencionada medida.
Esta situación también ha causado preocupación entre los caseteros de estos sectores, teniendo en cuenta las afectaciones económicas que han empezado a vivir.
En Puerto Velero, jurisdicción del municipio de Tubará, tan solo tres negocios abrieron sus puertas. Empero, las casetas permanecieron vacías debido a la falta de turistas y comensales.
Luis Sandoval, propietario de una caseta en este balneario, sostuvo que la afluencia de turistas ha bajado desde el pasado fin de semana, a causa de la presencia del Covid-19 en el país.
“Desde el domingo se ha visto la disminución de visitantes. Sabemos que es una medida tomada para resguardar la salud de todos, pero estamos preocupados por los perjuicios que podría tener para nosotros”, expuso el hombre, quien labora junto a sus familiares en dicha caseta.
En Caño Dulce, mientras algunos caseteros aprovechaban las hamacas para descansar, otros se dedican a conversar y rememorar anécdotas para “matar el tiempo libre”.
Jaime González, propietario de un pequeño negocio en este balneario ubicado en Tubará, aseguró que no han recibido las condiciones en que opera el cierre de playas en el departamento.
“No sabemos cómo va a operar este cierre de las playas. No hemos recibido ni una comunicación del protocolo que debemos seguir, estamos preocupados por esta situación. Lo cierto es que la gente ha acatado la medida y ha dejado de venir”, expone el hombre, quien se dedica desde hace más de 50 años a este oficio.
González también evidenció que la proximidad de un puente festivo incrementa la afectación que tendrán las familias que viven del turismo en esta zona del Atlántico.
“Durante los festivos, las ventas se incrementaban. Ahora con el cierre, no podremos trabajar y eso afecta el bolsillo de todos nosotros. Esta es una situación muy alarmante para nosotros”, dijo.
En las playas de Miramar,
ubicadas en el municipio de Puerto Colombia, la mayoría de negocios no abrió sus puertas por la falta de clientes.
Por su parte, los comerciantes ubicados Pradomar (Puerto Colombia) hicieron un llamado a las autoridades competentes para que les brinden una ayuda y así paliar los efectos negativos de la medida en su economía.
“Las autoridades locales no nos han dicho nada. Sabemos que debemos cerrar por el coronavirus, pero es una medida que nos afecta y pedimos que nos brinden algún tipo de ayuda”, puntualizó el mesero Willie González.