El peso de lo intangible
Doña Margarita vivía en la mitad de una calle larga en una casa de dos pisos con ventanas apaisadas cubiertas por cortinas de velo y rejas interiores blancas que, aunque ella se opuso a tener, los tiempos inseguros de aquel momento le obligaban a hacerlo.
La señora Margarita asomaba con disimulo pero con frecuencia por una de las ventanas del segundo piso desucas a, desde allí observaba con cuidado, elaboraba en sus pensamientos y la mayoría de sus ideas las compartía en horas de la tarde cuando algún vecino iba a visitarle. Siempre tenía visitas. Sus charlas estaban basadas en sus percepciones, citaba todo lo que no se toca y aunque su memoria era cambiante, sus planteamientos casi siempre asertivos. Nunca se supo a ciencia cierta como lograba alertar e inspirar al mismo tiempo. Ella siempre dijo que así funcionaba su cabeza y su Dios. Fe, era su palabra favorita.
Aprendí de ella que en los momentos difíciles, intangibles como la fe, son soporte monumental. Hoy, quise ir un poco mas allá. Consulté tres médicos expertos cada uno en su disciplina con el ánimo de saber si las en las enseñanzas de doña Margarita hay algo de asiento científico y, si en tiempos donde la salud física se encuentra amenazada podemos de alguna manera proteger la salud mental.
Mi gran inquietud: El peso de lo intangible. Podemos recurrir a lo intangible para encontrar alivio?
La Dra. María Rivas, especialista en Psicología Cognitiva, me precisó:
“El estudio de la actividad cerebral es un campo infinito, la neurociencia da prueba cierta del registro de lo intangible en la actividad del cerebro. Las estructuras de los mapas mentales así lo comprueban.
La memoria no es un recuerdo estático se alimenta permanentemente, si usted por ejemplo la recrea de entusiasmo encontrará un registro de ello que puede ser medible en pruebas como el pet scan o la resonancia magnética funcional. El fortalecimiento del aprendizaje de las habilidades no físicas es fundamental”
La Dra. Marisol Duque, experta en medicina Biológica:
“Científicamente esta comprobado, las emociones están vinculadas con la función metabólica, existe un puente que comunica lo intangible con lo físico y genera una respuesta visible. Son dos universos íntimamente asociados tienen lenguajes paralelos. Le doy un ejemplo la capacidad de superación de un ser humano puede producir regeneración celular. El cerebro es un banco de información, pero evolutivo. Y el propósito de esa evolución es espiritual”
Dr. Juan Camilo Rodríguez, neurólogo clínico, adjunto de la clínica Porto Azul y clínica La Misericordia en Barranquilla, a la misma inquietud respondió:
“Se conoce como el circuito anímico, de gran importancia. Hay una relación evidente de lo intangible en la función cerebral. Todo tipo de estímulo a la memoria emotiva tiene resultados comprobables. Hay avances muy relevantes. Un estudio reciente demuestra cómo a través de una magneto encefalografía, se evidencia con imágenes en tiempo real, una zona del cerebro en la región temporal donde se puede estimular el enamoramiento o la espiritualidad, se conoce como la percepción de Dios, imagínese…”
La ciencia también respalda su legado doña Margarita. La Fe es inquebrantable. Podemos a través de ella, del amor, la esperanza, la ilusión y el sueño, no solo proteger la salud física y mental, sino también construir la escalera del crecimiento personal y espiritual.
En ‘Palabras Pendientes’ disponible aquí en todas las plataformas digitales de EL HERALDO, un diálogo de fe y esperanza con Chabuco, el artista que siempre persigue sus sueños.