LOS QUE SIGUEN CERRADOS
Los centros comerciales como el Viva Barranquilla y el Mall Buenavista han implementado medidas de bioseguridad y refuerzan sus protocolos con énfasis en la protección de visitantes y empleados. La señalización y distanciamiento suman a los controles. “Desde el inicio del aislamiento preventivo obligatorio hemos implementado los más estrictos estándares de bioseguridad con el fin de brindar todas las medidas de protección necesarias para nuestros visitantes y colaboradores”, dijo Pablo Pulido, gerente de Mall Plaza Colombia.
Las personas mayores de 70 años o con morbilidades siguen bajo el confinamiento. Los restaurantes, los bares, las discotecas, los billares y los casinos, los parques de diversiones o temáticos, los cines, los teatros, los gimnasios y los coliseos siguen cerrados. Al igual que las terminales terrestres, los aeropuertos e iglesias. Colegios y universidades, en agosto.
Plaza del Sol en Soledad.
Si es usted una de las personas que solo pase y observa vitrinas antes deberá someterse a una toma de temperatura, entregar su identificación y si tiene su tapaboca podrá ingresar.
“El software garantizará que en cada puerta se haga el conteo para cumplir con el aforo de 35%. Estimamos que pasaremos de un promedio de 30.000 antes de la pandemia a 12.000 personas diarias que visitarán con todos los protocolos de toma de temperaturas y bioseguridad para visitantes y empleados”, indicó María Víctoria Serrano, gerente de mercadeo del Portal del Prado.
Los servicios de empleados en casa, los de los laboratorios en universidades tendrán que abrirse de manera programada. El Gobierno señaló que algunos estudiantes seguirán en casa, otros podrán asistir con control a prácticas en sus instituciones educativos.
El comercio al por menor podrá reabrir solo cumpliendo medidas de afluencia y cantidad de clientes en sus locales.
Servicios profesionales médicos serán abiertos para aquellos no relacionados con la COVID-19 como estéticos y medicina especializada.
Peluquerías podrán reabrir controlando la cantidad de clientes en el local, y con atención mediante cita previa, y medidas de bioseguridad.
Este servicio es uno de los más esperados. Howard Espitia, fundador hace 3 años de la Asociación Colombiana de Expertos en Belleza (Ascebell) dijo que la apertura mantendrá algunos negocios cerrados. “Las exigencias son altas y ya estaban. Ahora tendremos que cumplir con vestidos antifluidos. Hay que hacer inversiones. Para el proceso abrimos una plataforma nacional que registró 7.800 peluqueros, esteticistas, manicuristas entre otros, de los cuales más de 900 son de Barranquilla”.
Eduardo Rodríguez Arias, peluquero de 64 años, pensionado con un salario mínimo, dueño de una escuela para cortar cabello y miembro de Ascebell destacó que la pandemia ha dado la oportunidad que esta profesión desde el punto de vista de control de bioseguridad cambie. “Nadie nos controla. Que la Alcaldía ofrecerá un certificado del Incontec, lo apoyo. El reto está en que este servicio por las exigencias se encarecerá”..
Yilda Castro merlano Directora Fenalco Atlántico “Apoyamos la formalización de las peluquerías”.