Los rivales de Junior, un paso adelante
Alfredo Padilla anotó el gol que espantó el ‘fantasma’.
Aquella salvada del descenso por parte de Junior, el 9 de noviembre de 2008, llevó a preguntarme quiénes estuvieron en el juego en el que el equipo barranquillero ganó 1-0 al Huila en Neiva. Yo transmití ese partido y confieso que tuve que recurrir a la historia escrita.
El haber sorteado con éxito el tema para quedarse en la primera división, es un logro tan importante como ganar una estrella, le he dicho repetidas veces a Julio Comesaña. Sólo pregunten a un hincha de River Plate en Argentina la montada que le tienen los hinchas de Boca por haberse ido a la B, como dicen ellos. Comenzando que escriben ‘RiBer’, con B grande.
Esa tarde dominical, Junior jugó con Didier Muñoz; Hayder Palacio, Hilario Cuenú, John Valencia y Roberto Carlos Cortés; Dúmar Rueda, Javier Flórez, Pedro Ortega y Giovanni Hernández; Alfredo Padilla y Teófilo Gutiérrez. Después, Luis Yánez por Padilla; Jorge Banguero por Flórez y Roller Cambindo por Ortega.
El gol para ganar al Huila y espantar el fantasma del descenso, que así bautizamos esa campaña, en la que Comesaña llegó como bombero a apagar el fuego que no pudo extinguir el Sachi Escobar, fue anotado por Alfredo Padilla a los 27 minutos de juego.
Alfredito se volvió un ídolo. Puntero derecho, gambeteador, ágil y con gol. Toda una promesa que se nos fue diluyendo cuando la vida le cambió con triunfos, buen contrato en Junior y la esperanza de ir al exterior.
Salido de los campos del Barranquilla FC en el 2006, Padilla se fue perdiendo entre la prosperidad que le daba el fútbol y la necesidad de prepararse bien. Y tuvieron que cederlo a Equidad, al Huila y después pasó entre Colombia y Venezuela. Nunca más jugó en equipo grande. El último club donde ha militado es el Atlético Vega Real, de República Dominicana.
Padilla fue otro jugador de los que pudo ser y no fue porque las luces lo terminaron encandilando. Y no lo digo para recriminarle nada. Lo digo con nostalgia...