Autoridades evalúan escenarios ante saturación de cementerios
El Ministerio de Salud ha dado lineamientos ante un posible caso de saturación y falta de disponibilidad de bóvedas Soledad prepara su plan de contingencia.
Dando estricto cumplimiento a los lineamientos del Gobierno nacional, la Secretaría de Salud de Barranquilla trabaja en un plan de contingencia frente a la pérdida de capacidad de hornos crematorios y disponibilidad de bóvedas ➲ Soledad, por su parte, prevé la construcción de nuevos espacios para la disposición final de los cadáveres confirmados o sospechosos de COVID-19.
Después de que en Barranquilla se avalara la inhumación como contingencia ante el incremento de muertes, ahora se pone sobre la mesa un nuevo interrogante sobre qué sucederá cuando las bóvedas de los cementerios colapsen.
El Ministerio de Salud en las orientaciones para manejo, traslado y disposición de cadáveres ha explicado que en el marco de la emergencia sanitaria se puede presentar un aumento de muertes que pueden exceder los estándares normales de la operación frente al manejo de cadáveres y constituirse en emergencia catastrófica de salud pública a nivel local.
Ante dicha situación, las alcaldías con el apoyo de los consejos municipales o consejos territoriales de gestión del riesgo y demás entidades asociadas a la gestión de los cadáveres, podrán establecer planes considerando proyecciones de afectación, necesidades, escenarios y actos administrativos a que haya lugar.
En Barranquilla, la Secretaría de Salud prefiere no adelantarse a ese panorama, sin embargo, dice que la sala de crisis ha evaluado varios escenarios.
“Cada uno de ellos depende de la lectura diaria de la situación. Existe aún alta incertidumbre sobre el comportamiento de la pandemia”, indicó el secretario de Salud, Humberto Mendoza.
Mendoza reitera que la Alcaldía ha hecho y sigue dando estricto cumplimiento a los lineamientos del Minsalud frente al manejo y disposición final de cadáveres confirmados o con sospecha de COVID-19.
“Es importante también que la comunidad en general cumpla con los mecanismos de bioseguridad, no podrán hacerse aglomeraciones alrededor de estas actividades. Lo primero siempre será el bien colectivo y la protección de la salud pública”.
Aunque no se ha llegado a este punto, en la ciudad los cuatro hornos crematorios disponibles, que antes prestaban sus servicios 12 horas, ahora trabajan 24 con una capacidad de 35 cremaciones diarias.
“Eso puede variar si algún horno disminuye o aumenta la producción, en promedio son 25 por día, teniendo en cuenta que se espera un incremento de casos en junio y julio se ha impartido la instrucción de utilizar la inhumación”, agregó Mendoza.
SOLEDAD. Ante el incremento de contagios y la suma de 46 fallecidos en Soledad por coronavirus, el jefe de Salud Pública, Alvin Martínez, señaló que en este municipio como plan de contingencia, se prevé la construcción de bóvedas en el cementerio nuevo, que funciona en la entrada de Soledad 2000.
LUGARES DIFERENTES A LOS CEMENTERIOS. Para adaptar un lugar como disposición final del cadáver diferente a los cementerios, Minsalud ha expuesto que primero se debe verificar que el cementerio público o privado esté sin disponibilidad y que los aledaños no estén en capacidad de recibir más cadáveres.
Luego se deberá establecer un lugar o terreno acorde con los usos del suelo de acuerdo al plan de ordenamiento territorial.
También se tendrá que disponer un terreno ubicado en zonas no inundables, alejado de fuentes de contaminación y de población cercana.
Además deberá tener un cerco perimetral y vigilancia permanente.
Otro de los requisitos es que deberá verificar un nivel freático para las sepulturas o tumbas en tierra, no inferior a 2 metros con respecto al fondo de la sepultura, para permitir la adecuada disposición de los cadáveres y que no haya contaminación de aguas subterráneas.
La inhumación se deberá hacer en sepulturas individuales, marcadas e identificadas con los datos básicos del cadáver (nombre completo, fecha del fallecimiento).
Asimismo, se deberá brindar información a los familiares relacionada con el proceso de disposición final del cuerpo o restos huma
nos y se deberá garantizar el mantenimiento permanente de las condiciones sanitarias de estos sitios.
El Ministerio anota que las indicaciones se dan en el marco del estado de emergencia, pero una vez superada la situación las entidades territoriales deberán establecer las condiciones y capacidades para poder diseñar y construir cementerios que cumplan con las disposiciones establecidas en la Resolución 5194 de 2010. De esa manera se reestablecerán las condiciones normales para los procesos de inhumación en los territorios.
CREMACIóN. En todo caso el Ministerio ha dicho que la disposición final de cadáveres de personas fallecidas por COVID -19 se hará preferiblemente por cremación. Solo en el caso en el que no se cuente con instalaciones para este procedimiento, se practicará la inhumación en sepultura o bóveda.
Otro aspecto es que en la eventualidad en el que un deceso por el virus ocurra en la vivienda, lo primero que deben realizar los familiares es la notificación a la Secretaria de Salud para que esta realice la coordinación con la EPS respectiva y se efectúe el proceso de certificación del cadáver, toma de muestras, alistamiento y posteriormente entrega al servicio funerario.
En el caso de las velaciones, despedidas o ceremonias religiosas se deben evitar aquellos rituales fúnebres que conlleven reuniones o aglomeraciones de personas, teniendo en cuenta que el transporte, la cremación o inhumación se deben realizar en el menor tiempo posible y cumpliendo las medidas de bioseguridad y las orientaciones que establezcan el personal de salud y las administraciones de los cementerios.