Es la demanda
Las últimas cifras del DANE lo corroboran: en el mes de julio la economía cayó -9,55%. Es decir, la reactivación de la economía colombiana no arranca y la apertura de actividades no la garantiza. Ante esta realidad, el sector productivo impulsado por los grandes gremios ha puesto el grito en el cielo y llevaron al gobierno a crear una comisión con ellos para tomar medidas que saquen a la producción de esta situación. La verdad es que muchos afirmamos que los incentivos para mantener nóminas y proteger la quiebra de empresas fueron tardíos y menores a lo que se necesitaba.
El Panorama Fiscal de América Latina y el Caribe de la CEPAL 2020 muestra un dato que confirma lo señalado. La proporción del PIB asignado a apoyos a la pandemia en 16 países de América Latina y el Caribe muestra la mezquindad del gobierno Duque en medio de semejante crisis. Mientras Chile asignó 5,7% del PIB; Perú, 4,8%; Argentina, 3,9%; inclusive Bolivia, 2,3%; el dato de Colombia es vergonzoso, 1,7%. En la región el promedio es de 3.2%, es decir, nuestro país quedó en la cola en términos de la respuesta a las demandas del Covid—19.
Pero lo más grave es cómo se distribuyeron estos recursos. El gobierno siempre ha creído, presionado por los gremios, que lo primero es reactivar la oferta y así ha actuado y aparentemente seguirá actuando. Sin embargo, el desempleo es superior al 20% y la inflación está en terreno negativo. Se le ha dicho hasta la saciedad que hay un gravísimo problema de demanda; que mucha gente, 25% dicen las encuestas, no puede asegurar las 3 comidas diarias, es decir, son indigentes. Los vulnerables, 39% antes de la pandemia, que hoy mínimo son más de 15 millones, están recibiendo el equivalente a lo necesario para comer, $160.000, y estas ayudan no llegan a más de 3 millones de personas, mientras a los pobres les dan el doble.
Por qué será que el gobierno después de 6 meses de pandemia no logra entender que hay un gravísimo problema de demanda y que si se quedan solo en la oferta, quiénes les van a comprar a los productores. Pero no. Al gobierno la gente, especialmente la vulnerable, no lo conmueve y no reconoce que la plata que les giren a estos sectores se va toda a demanda de bienes y productos básicos que son el fuerte de nuestra producción. Exportar es una quimera en estos momentos y sigue siendo la demanda interna la que dinamiza la economía. Pero no han logrado aceptar algo que ya es absolutamente evidente: reactivar la producción sin darse cuenta de este pequeño detalle, la gente, es decir que el grueso de este país no tiene con que comprar, no sacará a este país de esta inmensa crisis económica.
Nadie niega que hay que apoyar a la industria, especialmente a la micro y pequeña, que es la gran mayoría. Pero sigan descuidando a la gente y verán que no solo no reactivan la economía, sino que se aumenta un malestar que ya está a flor de piel de amplísimos sectores del país. Es la demanda, por favor.